El pleno que la Corporación municipal de A Rúa permitió ayer a la nacionalista María González Albert tomar posesión del cargo de concejala. Sustituyó a Xoaquín Pérez Fernández, quien había presentado su dimisión tras los malos resultados obtenidos por el BNG en las últimas elecciones.
Realizó su primera intervención en el debate del convenio de cooperación del Concello con la Diputación, referido a la recogida de residuos sólidos urbanos. El punto fue aprobado con los votos de los cinco concejales populares y los dos de Rueses Unidos Adiante, a pesar de la oposición de los tres ediles socialistas y de la recién incorporada.
El portavoz del PSOE, Luis Fernández Gudiña, criticó el convenio por estimar que abre las puertas a la privatización, porque considera excesiva la vigencia de 30 años y además resta competencias a los concellos. A su vez, la nacionalista María González argumentó que tiene serias dudas respecto al posible ahorro puesto sobre la mesa por el alcalde para justificar la firma del convenio. Finalmente, mostró su rechazo a las diputaciones provinciales.
El independiente José Vicente Solarat López apoyó el convenio por estimar que sigue garantizando la soberanía del Concello. La defensa corrió por cuenta del alcalde popular, Avelino García Ferradal. Expuso que el convenio supone un importante ahorro, además de ofrecer un buen servicio. También dijo que los concellos que no se sumen ahora, deberán pagar una entrada y criticó a PSOE y BNG por oponerse a las diputaciones en Ourense y no hacerlo en Lugo, donde la preside un socialista.
El portavoz del PSOE, Luis Fernández Gudiña, criticó el convenio por estimar que abre las puertas a la privatización, porque considera excesiva la vigencia de 30 años y además resta competencias a los concellos. A su vez, la nacionalista María González argumentó que tiene serias dudas respecto al posible ahorro puesto sobre la mesa por el alcalde para justificar la firma del convenio. Finalmente, mostró su rechazo a las diputaciones provinciales.
El independiente José Vicente Solarat López apoyó el convenio por estimar que sigue garantizando la soberanía del Concello. La defensa corrió por cuenta del alcalde popular, Avelino García Ferradal. Expuso que el convenio supone un importante ahorro, además de ofrecer un buen servicio. También dijo que los concellos que no se sumen ahora, deberán pagar una entrada y criticó a PSOE y BNG por oponerse a las diputaciones en Ourense y no hacerlo en Lugo, donde la preside un socialista.
