Un día después de haber pactado que el alcohol (salvo el vino en los magostos) y las comidas 'privadas' de los concejales no podrán ser costeadas con cargo a la asignación de los grupos municipales, el alcalde de la ciudad, el socialista Agustín Fernández, aún insistía en que está sobre la mesa la eliminación de esos fondos destinados a facilitar el funcionamiento de los grupos políticos. Asume con ello la propuesta de la ejecutiva local de su partido, que informó a la asamblea de que es partidaria de la desaparición, aunque sólo hasta que se regule su destino.
Ese pronunciamiento, que no es nuevo en boca del regidor, ya ha sido rechazado, otra vez, ayer mismo, por el presidente de la Diputación, Manuel Baltar, y por el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que en un acto celebrado en la ciudad declararon que las asignaciones a los grupos políticos son necesarias 'para el funcionamiento de la democracia'.
El gobierno municipal socialista, que aún debe cuantificar las facturas en alcohol y comidas que debe devolver al grupo -los llamados gastos 'impropios'- para destinarlas a fondos sociales y depurar responsabilidades por esos pagos cuestionados, destacó en la inauguración del congreso de ecoinnovación y a preguntas de los periodistas la normalidad de la asamblea local celebrada el lunes. Primó, dijo, el 'sentidiño' y el debate constructivo de aportación de ideas, restando importancia a la ausencia de los concejales 'pachistas'.
El gobierno municipal socialista, que aún debe cuantificar las facturas en alcohol y comidas que debe devolver al grupo -los llamados gastos 'impropios'- para destinarlas a fondos sociales y depurar responsabilidades por esos pagos cuestionados, destacó en la inauguración del congreso de ecoinnovación y a preguntas de los periodistas la normalidad de la asamblea local celebrada el lunes. Primó, dijo, el 'sentidiño' y el debate constructivo de aportación de ideas, restando importancia a la ausencia de los concejales 'pachistas'.
