La directora del Festival Internacional de Teatro de Ourense (FITO), Ánxeles Cuña, sitúa a la provincia como la capital teatral de Galicia al contar con muestras como la Moti y la Miteu.
¿Cuáles son los objetivos principales de la segunda edición del FITO que arranca hoy?
Nuestra principal meta es consolidar este festival dentro de la sociedad ourensana como un certamen de gran importancia en toda la provincia. Queremos que este festival se convierta en un punto de encuentro intercultural en Galicia y en España, así como dar la oportunidad a los ciudadanos para que conozcan y disfruten de representaciones y compañías teatrales de relevancia internacional. Por eso hemos creado un programa en el que convivirán grupos de gran trayectoria con otros emergentes, para así atraer un público diverso y juvenil.
¿Cuál es el secreto para atraer a los jóvenes al mundo de la dramaturgia?
Principalmente ofrecer obras y representaciones que vayan más allá de lo estrictamente convencional y que por su contenido novedoso llamen la atención de inmediato.
¿Qué actuaciones destacaría dentro del programa?
La compañía andaluza Atalaya, que recibió el Premio Nacional de Teatro 2008, participará en esta segunda edición con la obra A ópera dos tres centavos. También destaca la participación de Angélica Liddell con la obra Fareite invencible coa miña derrota y del argentino Daniel Veronese con O desenvolvemento da civilización vindeira, así como compañías pro cedentes de Chile, Italia, Brasil o Portugal. Muchos de estos grupos participan en festivales tan importantes como el de Otoño de Madrid, y los ourensanos tendremos la oportunidad de disfrutar con sus actuaciones en nuestra propia ciudad, lo que significa un ahorro para las familias pues ir al teatro a Madrid ronda los 300 euros y aquí podremos ver varios espectáculos por 50.
¿Qué dificultades supone organizar un festival de estas características en tiempos de crisis?
Fácil no es, pero nosotros tuvimos la suerte de que este certamen nació el año pasado con mucha fuerza y entusiasmo, así como con el apoyo institucional que este año continúa, en este caso por parte del Concello, de la Diputación provincial, de la Vicerrectoría del Campus y de la Dirección Xeral de Cultura. Estas cuatro instituciones permitieron traer a la provincia un cartel teatral de lujo que no defraudará a nadie.
¿Fue complicado traer a estas compañías de talla internacional a Ourense?
Requiere mucho esfuerzo, tiempo, criterio, paciencia y llamadas. El cartel que hoy estrenamos tiene un trabajo impresionante detrás. De hecho este año queríamos traer a Charlotte Chaplin pero por motivos de agenda no pudo ser. Sin embargo ya hemos iniciado los contactos para que venga a la tercera edición de la Fito.
Además de la FITO, la ciudad cuenta con dos certámenes teatrales que ya están posicionados a nivel autonómico y estatal como la Miteu y la Moti. ¿Considera que Ourense está preparada para convertirse en la capital teatral de Galicia?
Tenemos todo para convertirnos en la capital del teatro gallego por excelencia. Todos estos certámenes y festivales lo que hacen es sumar, y entre más se sume, mejor es para la ciudad. Ourense es una tierra de grandes creadores y de importantes artistas, basta con mencionar a Otero Pedrayo y a Blanco Amor. Pienso que es precisamente por eso por lo que los ourensanos responden tan bien al teatro, lo cual me da mucha satisfacción. No podemos olvidar que en la ciudad tenemos festivales en otoño, primavera e invierno, y además tenemos actos teatrales en verano. Asimismo, Ribadavia y Carballiño completan una programación envidiable para cualquier provincia.
Nuestra principal meta es consolidar este festival dentro de la sociedad ourensana como un certamen de gran importancia en toda la provincia. Queremos que este festival se convierta en un punto de encuentro intercultural en Galicia y en España, así como dar la oportunidad a los ciudadanos para que conozcan y disfruten de representaciones y compañías teatrales de relevancia internacional. Por eso hemos creado un programa en el que convivirán grupos de gran trayectoria con otros emergentes, para así atraer un público diverso y juvenil.
¿Cuál es el secreto para atraer a los jóvenes al mundo de la dramaturgia?
Principalmente ofrecer obras y representaciones que vayan más allá de lo estrictamente convencional y que por su contenido novedoso llamen la atención de inmediato.
¿Qué actuaciones destacaría dentro del programa?
La compañía andaluza Atalaya, que recibió el Premio Nacional de Teatro 2008, participará en esta segunda edición con la obra A ópera dos tres centavos. También destaca la participación de Angélica Liddell con la obra Fareite invencible coa miña derrota y del argentino Daniel Veronese con O desenvolvemento da civilización vindeira, así como compañías pro cedentes de Chile, Italia, Brasil o Portugal. Muchos de estos grupos participan en festivales tan importantes como el de Otoño de Madrid, y los ourensanos tendremos la oportunidad de disfrutar con sus actuaciones en nuestra propia ciudad, lo que significa un ahorro para las familias pues ir al teatro a Madrid ronda los 300 euros y aquí podremos ver varios espectáculos por 50.
¿Qué dificultades supone organizar un festival de estas características en tiempos de crisis?
Fácil no es, pero nosotros tuvimos la suerte de que este certamen nació el año pasado con mucha fuerza y entusiasmo, así como con el apoyo institucional que este año continúa, en este caso por parte del Concello, de la Diputación provincial, de la Vicerrectoría del Campus y de la Dirección Xeral de Cultura. Estas cuatro instituciones permitieron traer a la provincia un cartel teatral de lujo que no defraudará a nadie.
¿Fue complicado traer a estas compañías de talla internacional a Ourense?
Requiere mucho esfuerzo, tiempo, criterio, paciencia y llamadas. El cartel que hoy estrenamos tiene un trabajo impresionante detrás. De hecho este año queríamos traer a Charlotte Chaplin pero por motivos de agenda no pudo ser. Sin embargo ya hemos iniciado los contactos para que venga a la tercera edición de la Fito.
Además de la FITO, la ciudad cuenta con dos certámenes teatrales que ya están posicionados a nivel autonómico y estatal como la Miteu y la Moti. ¿Considera que Ourense está preparada para convertirse en la capital teatral de Galicia?
Tenemos todo para convertirnos en la capital del teatro gallego por excelencia. Todos estos certámenes y festivales lo que hacen es sumar, y entre más se sume, mejor es para la ciudad. Ourense es una tierra de grandes creadores y de importantes artistas, basta con mencionar a Otero Pedrayo y a Blanco Amor. Pienso que es precisamente por eso por lo que los ourensanos responden tan bien al teatro, lo cual me da mucha satisfacción. No podemos olvidar que en la ciudad tenemos festivales en otoño, primavera e invierno, y además tenemos actos teatrales en verano. Asimismo, Ribadavia y Carballiño completan una programación envidiable para cualquier provincia.
