La mayoría de subtramos de la línea de alta velocidad entre Ourense y Lubián, dentro de la nueva conexión con la Meseta, están ya encaminados, después del impulso de licitaciones y adjudicaciones realizado entre 2011 y 2012.
Así, en la actualidad se han contratado ya obras por 1.793 millones de euros, mientras están pendientes de contratación tramos cuyo importe de licitación está estimado en más de 605 millones.
El grueso de la obra se corresponde con la 'macrolicitación' promovida por el anterior ministro de Fomento, que se dividió en 18 subtramos entre la localidad ourensana de Porto (en el municipio de Vilar de Barrio) y la zamorana de Requejo, debido a la gran complejidad orográfica y al elevado coste de las obras. De estos 18 subtramos, actualmente están ya contratados 17, por un importe total de 1.547 millones de euros. El único pendiente de adjudicar es la vía izquierda del túnel de Prado, aunque ya está licitado desde el pasado mes de mayo, por importe de 127,4 millones.
En todo caso, de este trazado forma parte otro subtramo más, el correspondiente a la vía izquierda del túnel de Padornelo, para el que se va a aprovechar la estructura existente en la vía actual, aunque reformada. Por eso, las obras en este punto aún no fueron licitadas, ya que su contratación no está prevista hasta que el resto de la línea esté avanzada (para evitar, así, la afectación a la circulación actual).
La parte más avanzada de la nueva salida ferroviaria a la Meseta se corresponde con los 22 kilómetros entre Prado (Vilar de Barrio) y Taboadela, que ya habían sido contratados a finales de 2010. Se trata de tres subtramos que fueron contratos por un importe de 245,9 millones de euros. Según los últimos datos facilitados por el Gobierno, las obras registran un nivel de ejecución medio del 33%.
ACCESO A OURENSE
Del impulso recibido en los últimos meses por la conexión de AVE con la Meseta se excluye el subtramo de acceso a Ourense. Los 16,9 kilómetros entre Taboadela y Ourense llevan mayor demora porque se optó por realizar un trazado diferente al previsto en un principio (evitando el paso por la ciudad), pero ese recorrido cuenta ya con el visto bueno de Medio Ambiente desde el 10 diciembre de 2011. El permiso ambiental permite que el estudio informativo reciba la aprobación definitiva, proceso que tarda entre uno y tres meses, pero van ya más de ocho y aún no se ha emitido.
Además, Fomento había contratado los proyectos de obra para ir acelerando los trámites, pero a día de hoy siguen pendientes de que se apruebe definitivamente el estudio informativo.
El grueso de la obra se corresponde con la 'macrolicitación' promovida por el anterior ministro de Fomento, que se dividió en 18 subtramos entre la localidad ourensana de Porto (en el municipio de Vilar de Barrio) y la zamorana de Requejo, debido a la gran complejidad orográfica y al elevado coste de las obras. De estos 18 subtramos, actualmente están ya contratados 17, por un importe total de 1.547 millones de euros. El único pendiente de adjudicar es la vía izquierda del túnel de Prado, aunque ya está licitado desde el pasado mes de mayo, por importe de 127,4 millones.
En todo caso, de este trazado forma parte otro subtramo más, el correspondiente a la vía izquierda del túnel de Padornelo, para el que se va a aprovechar la estructura existente en la vía actual, aunque reformada. Por eso, las obras en este punto aún no fueron licitadas, ya que su contratación no está prevista hasta que el resto de la línea esté avanzada (para evitar, así, la afectación a la circulación actual).
La parte más avanzada de la nueva salida ferroviaria a la Meseta se corresponde con los 22 kilómetros entre Prado (Vilar de Barrio) y Taboadela, que ya habían sido contratados a finales de 2010. Se trata de tres subtramos que fueron contratos por un importe de 245,9 millones de euros. Según los últimos datos facilitados por el Gobierno, las obras registran un nivel de ejecución medio del 33%.
ACCESO A OURENSE
Del impulso recibido en los últimos meses por la conexión de AVE con la Meseta se excluye el subtramo de acceso a Ourense. Los 16,9 kilómetros entre Taboadela y Ourense llevan mayor demora porque se optó por realizar un trazado diferente al previsto en un principio (evitando el paso por la ciudad), pero ese recorrido cuenta ya con el visto bueno de Medio Ambiente desde el 10 diciembre de 2011. El permiso ambiental permite que el estudio informativo reciba la aprobación definitiva, proceso que tarda entre uno y tres meses, pero van ya más de ocho y aún no se ha emitido.
Además, Fomento había contratado los proyectos de obra para ir acelerando los trámites, pero a día de hoy siguen pendientes de que se apruebe definitivamente el estudio informativo.
