La empresa ya ha comenzado a señalizar la obra
La avenida Otero Pedrayo se prepara para el cambio de cara que sufrirá durante los próximos 12 meses, el plazo previsto por la Consellería de Infraestruturas para acometer la reforma integral de una de las principales arterias de entrada y salida de la ciudad, en la que se invertirán algo más de 1,4 millones de euros.
Tal y como consta en la memoria de la actuación, los trabajos arrancarán en el tramo junto al Edificio Politécnico, donde la Policía Local ya ha colocado la señalización, que impide el estacionamiento en el carril de servicio para poder acometer los trabajos.
Los principales cambios en la avenida llegarán en los cruces que actualmente dan acceso al Campus y a la zona de A Rabaza, que se regularán por medio de dos glorietas decoradas con elementos de agua, garantizando así una mayor seguridad.
Además, está previsto el pintado de un nuevo paso de cebra entre ambas rotondas, ya que la distancia entre los actuales supera los 300 metros, lo que incita a los viandantes a cruzar por el medio de la carretera para llegar hasta la zona universitaria. Otro de los aspectos que se incorpora al proyecto es cambiar los actuales semáforos que regulaban el tráfico por otros con pulsador para regular mejor los tiempos.
Está prevista también la renovación de todo el sistema de saneamiento y abastecimiento, muy antiguo, además de instalar un nuevo alumbrado público con tecnología LED.
Asimismo, para garantizar el correcto desarrollo de las obras se procederá a la supresión de carriles, pero no al corte total de la avenida. El vial de servicio entre Bernardo González Cachamuiña e Iglesias Alvariño se restringirá a garajes y carga y descarga durante buena parte de los trabajos, recoge el proyecto.
