El presidente provincial del PP y de la Diputación de Ourense volvió a defender este lunes el papel de estos organismos
El presidente provincial del PP y de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, ha defendido hoy el papel de las diputaciones provinciales, cabildos y consejos insulares, y en esta línea ha criticado "el desconocimiento" mostrado por los candidatos de Ciudadanos y del PSOE, Albert Rivera y Pedro Sánchez, en el acuerdo firmado por ambos portavoces para quitar estos entes.
"Ni Rivera ni Sánchez tienen un conocimiento exacto del papel de las diputaciones y de su importancia apoyando y asistiendo técnica, económica y jurídicamente a los ayuntamientos", ha expresado Baltar, quien ha recalcado la importancia de estas entidades a la hora de "representar los intereses de la provincia".
El presidente ourensano ha hecho esta valoración a preguntas relacionadas con el Pacto de Gobierno alcanzado entre estos dos partidos y que incluye entre sus puntos la supresión de las diputaciones, cuestión que el mandatario orensano ya ha trasladado a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para que se pronuncie. Por el momento, todavía no ha recibido respuesta.
Este viernes, la diputación de Ourense remitió una petición al secretario de la a FEMP en la que solicitaba la convocatoria "extraordinaria y urgente" de la junta de Gobierno para que se posicione en defensa de las diputaciones provinciales.
Habida cuenta del pacto que firmaron Sánchez y Rivera, "auténticos desconocedores de la realidad provincial", Baltar ha indicado que es la federación la que tiene que expresarse ahora y visualizar su apoyo a las diputaciones.
Precisamente, ha insinuado Baltar que unos de "los mayores interesados en defender la permanencia de las diputaciones" son los presidentes provinciales del PSOE, y ha resaltado el apoyo de presidentes de diferentes diputaciones socialistas como el de Jaén, Francisco Reyes, quien se ha mostrado "extremadamente indignado con ese acuerdo".
Asimismo, ha advertido a PSOE y Ciudadanos de que en caso de prosperar este punto ambos partidos tendrían que llevar adelante una reforma constitucional "que no tiene ningún viso de salir adelante".
El acuerdo necesitaría de las tres quintas partes de apoyo tanto en el Congreso como en el Senado, "que numéricamente no tienen", ha subrayado Baltar.
