El Banco de Alimentos de Ourense ha repartido esta Navidad 108.000 kilos de ayuda, entre fruta, carne congelada, comida no perecedera y productos de Navidad, lo que supone un 22% menos que en las fiestas del año pasado, cuando se entregaron 140.000 kilos, según datos facilitados por su coordinadora, Natalia González.
Pese a la inflación, las donaciones de los particulares han aumentado y las institucionales han descendido. “La colaboración en los supermercados ha subido mucho y se ha recuperado respecto a 2021, cuando había bajado un 60% a nivel nacional. Teníamos cierto miedo por la inflación”, reconoce González.
Durante esta campaña de Navidad, que empieza a mediados de noviembre y termina en Reyes, han recibido cerca de 2.000 kilos de carne congelada que donó Coren, pero han echado falta las aportaciones de varias instituciones. “El año pasado el Inorde donó 10.000 kilos de patatas y la Xunta, unos 1.700 kilos de carne de cerdo y ternera, quesos y miel. Además, la donación de carne congelada en 2021 fue mayor, ya que recibimos 3.000 kilos más que este año”, explica la coordinadora.
El Banco de Alimentos recibió ayer la visita del delegado de la Xunta, Gabriel Alén, que agradeció su colaboración a la treintena de agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de la provincia que han recogido alimentos. Tras la primera entrega, realizada este miércoles pasado, llegará una segunda, a principios del mes de enero.
El reparto de alimentos a las familias ya ha terminado. “Empezamos a repartir el 16 de diciembre y finalizamos el martes 20. Lo hacemos con antelación porque no entregamos directamente a las familias, sino a cada entidad de cada localidad y esta, a su vez, reparte a las familias. Por ello les damos un margen de tiempo”, dice González.
La asociación Amencer recibe seis toneladas menos de comida que en 2021
El gerente de la Asociación Xuvenil Amencer, Xulio César Iglesias, advirtió ayer que estas navidades han recibido seis toneladas menos de comida que durante las anteriores fiestas. Este año les donaron 9.198 kilos de comida, frente a los 15.000 de 2021. También descendió la cantidad de ropa entregada: 9.200, frente a 15.900 en el año anterior. El dinero se mantiene, 9.475 euros, mientras los juguetes crecen: 6.200, frente a los 5.600 de 2021.
Lo que más falta les hace es aceite, habas, garbanzos, quesos, leche y productos navideños como turrón, aseguró el gerente, que ayer estaba embalando todas las donaciones que esta mañana recogerán los vehículos de las Cáritas parroquiales, que son las encargadas de repartir los alimentos entre 1.233 familias (3.275 personas) a partir de esta tarde.
