La ourensana Carmen Barbosarealizó su tesis de licenciatura de la carrera de Historia sobre la figura del escritor Benito Fernández Alonso
Carmen Barbosa (Ourense, 1965) realizó su tesis de licenciatura de la carrera de Historia sobre la figura del escritor Benito Fernández Alonso después de que su tutor, Jesús de Juana López, catedrático de Historia Contemporánea en la UVigo, se lo propusiese. En aquel momento, Barbosa no conocía a fondo al intelectual, pero poco a poco fue descubriendo su importancia en la cultura ourensana. Al terminar la tesis, en el año 1995, el Concello de Entrimo y la Diputación provincial apoyaron la edición del trabajo en formato libro, una forma accesible de dar a conocer la vida del autor –que colaboró en las páginas de La Región– al resto de ourensanos. El lunes, 13 de mayo, el Liceo acoge la presentación de la segunda edición del tomo, a partir de las 20,00 horas en el salón noble. La versión incluye nuevos detalles, incluidos por la propia Carmen Barbosa.
¿Fue complicado encontrar información sobre Benito Fernández Alonso?
Mucho, ahora ya se encuentra información de él en Internet y además, la Diputación recuperó parte de sus libros durante los últimos años. Cuando empecé la investigación, su biblioteca estaba en una casa vieja de Entrimo, descatalogada por completo. Conté con ayuda del ayuntamiento de la localidad, lo que me permitió acceder a la vivienda y a sus libros y escritos almacenados.
¿Por qué decidió hacer una nueva edición?
Por petición de investigadores que querían conseguirlo y ya no quedaban ejemplares de la primera publicación. Al decidir hacer la reedición, aproveché para incorporar alguna novedad y así mejorar ciertos detalles.
¿Cree que su figura es todavía desconocida en la provincia?
Menos que antes, pero sigue conociéndose muy poco para lo importante que fue en su época.
¿Qué destacaría de él?
Era representante de la Comisión de Monumentos, junto con Lamas Carvajal o Manuel Sueiro, entre otros. Puso en marcha el Museo Arqueolóxico, Antiguo Museo de Pinturas en el Jardín del Posío -actual edificio del Instituto Otero Pedrayo-, donde también era el encargado de la conservación y organización de las piezas que iban acumulando. Aunque sea más conocida la generación cultural del Grupo Nós, con Vicente Risco y Otero Pedrayo, esta no se podría entender sin el grupo de Benito Fernández Alonso y sin antecesores como Saco y Arce. La de Benito era una forma artesanal de hacer historia.
¿Qué le llamó la atención en su investigación?
Descubrí diversas curiosidades, como sus estudios sobre el nombre de la ciudad. Él dice que Ourense no procede de la palabra oro, sino de aguas termales. También me llamó la atención que había elaborado una relación hasta su tiempo de todos los obispos de la Diócesis de Ourense.
¿Existen otras biografías sobre el escritor ourensano?
Por el momento la mía es la monografía más completa que existe sobre la vida y obra de Benito Fernández Alonso. Nadie se dedicó a buscar más sobre su figura. Es un orgullo que este libro sea solicitado por los investigadores.
