La borrasca Aline irrumpe en Ourense con fuertes lluvias

Una borrasca de lluvias incesantes, bautizada como Aline, dejó el jueves acumulados hasta 100 litros por metro cuadrado en la provincia. El noroeste, concretamente el concello de Avión, fue la zona que registró más precipitaciones. Al cierre de esta edición, había cerca de 110 litros por metro cuadrado acumulados.

En la ciudad, la estación meteorológica de A Ponte contabilizó 30 litros al final del día. Aunque no hubo grandes incidencias, el alcantarillado jugó malas pasadas a los bomberos durante toda la jornada, por lo que tuvieron que actuar en varios puntos. Además, en zonas como la avenida de Marín o la rotonda de Concepción Arenal se acumularon grandes balsas de agua en el asfalto.

A partir de hoy, Aline avanzará hacia el norte de Europa, pero el tren de frentes continuará pasando: se espera que siga lloviendo también durante toda la próxima semana.

Primeras nieves

A la par, las temperaturas irán bajando paulatinamente. Hoy en la ciudad la máxima será de 16 grados, uno menos que ayer, y la mínima rondará los 10. Además, el domingo, irrumpirá la nieve. La cota de nieve comenzará estando muy alta, en 1.500-2.000 metros de altitud, pero a lo largo del día bajará hasta 700 a 1.000 metros.

En la zona de Valdeorras, especialmente en Carballeda de Valdeorras, el viento sopló con fuerza. Los vecinos vivieron ráfagas de 122 kilómetros por hora. En la Serra do Eixe, las circunstancias fueron parecidas: el viento circuló a más de 95 km/hora. Manzaneda fue la tercera con el aire más fuerte, con vientos de 88 kilómetros por hora.

Las obras de Celso Emilio

La falta de previsión ocasionó que se formasen piscinas y charcos de barro en los socavones de esta calle, que está en obras tras la rotura de una tubería. Precisamente, el incidente que ocasionó que se levantase todo el asfalto ocurrió por efecto de una tormenta. El Concello había soldado las tapas de alcantarilla a la carretera y, al llover, se levantó el asfalto.

Problemas en las carreteras gallegas

Las intensas lluvias provocaron varios percances a lo largo de las carreteras gallegas. Las lluvias no solo afectar a Ourense, toda la comunidad sufrió intensas lluvias que dejaron algunos desperfectos, como por ejemplo el sufrido en la A-6, que conecta Madrid con A Coruña. A su paso por Becerreá, en Lugo, la carretera sufrió un desprendimiento que afectó a uno de los carriles, golpeando a un vehículo que se encontraba circulando por él.