El Consejo de Administración de Caixanova se reunió ayer en Ourense, en un encuentro marcado por las expectativas acerca de la fusión de las dos cajas gallegas. Una cuestión a la que el presidente de la entidad aludía escuetamente a la salida del encuentro, alegando que se había informado a los consejeros al respecto, pero 'de momento seguimos trabajando y hablaremos cuando haya cosas que comentar'.
Al margen de este tema, en el encuentro se analizaron los resultados de la caja al cierre del primer trimestre de 2010, en el que Caixanova logró reducir su tasa de morosidad al 4,78%, situándose muy por debajo de las cajas de ahorros de su tamaño (6,3%), según manifestó el director general, José Luis Pego, en la reunión. Al mismo tiempo, la entidad continúa concediendo liquidez a empresas y particulares, con un crecimiento con respecto al mismo periodo del año pasado del 3,8% (mientras que las cajas similares lo redujeron un 1,8%).
En el encuentro también se analizaron los datos sobre recursos de clientes, que crecieron un 3,7% en los últimos 12 meses (frente a un retroceso del 3,4% del conjunto de las grandes cajas de ahorro españolas), lo que, a juicio de Caixanova, 'deja patente la confianza de los clientes'. En concreto, el ahorro a la vista de empresas y particulares ha registrado un avance del 18,9%, lo que permite a la entidad obtener liquidez a menor coste.
Por otra parte, Caixanova está siguiendo una política de 'prudencia', con el fin de fortalecerse con nuevas dotaciones, tanto las de carácter obligatorio como las provisiones voluntarias, a costa de reducir los beneficios. Así, en el primer trimestre del año acumuló unas provisiones de 69,7 millones de euros, con lo que el 'colchón' total asciende a 721,6 millones. También destaca la reducción de gastos de administración en un 6,1%, gracias al plan de control que la entidad está realizando y que le ha permitido ahorrar seis millones de euros en el primer trimestre.
El resultado antes de impuestos asciende a 22,5 millones de euros, que supone un descenso del 29,2% respecto al primer trimestre de 2009, debido a que en este periodo se había contabilizado como ingreso extraordinario una parte de las pluvalías obtenidas por la venta de Unión Fenosa.
En el encuentro también se analizaron los datos sobre recursos de clientes, que crecieron un 3,7% en los últimos 12 meses (frente a un retroceso del 3,4% del conjunto de las grandes cajas de ahorro españolas), lo que, a juicio de Caixanova, 'deja patente la confianza de los clientes'. En concreto, el ahorro a la vista de empresas y particulares ha registrado un avance del 18,9%, lo que permite a la entidad obtener liquidez a menor coste.
Por otra parte, Caixanova está siguiendo una política de 'prudencia', con el fin de fortalecerse con nuevas dotaciones, tanto las de carácter obligatorio como las provisiones voluntarias, a costa de reducir los beneficios. Así, en el primer trimestre del año acumuló unas provisiones de 69,7 millones de euros, con lo que el 'colchón' total asciende a 721,6 millones. También destaca la reducción de gastos de administración en un 6,1%, gracias al plan de control que la entidad está realizando y que le ha permitido ahorrar seis millones de euros en el primer trimestre.
El resultado antes de impuestos asciende a 22,5 millones de euros, que supone un descenso del 29,2% respecto al primer trimestre de 2009, debido a que en este periodo se había contabilizado como ingreso extraordinario una parte de las pluvalías obtenidas por la venta de Unión Fenosa.
