Las tiendas de la ciudad registraron una notoria actividad al caer la tarde
El comercio no hizo puente y abrió ayer las puertas, algo que vienen siendo habitual en los últimos años, para aprovechar la afluencia de visitantes a la provincia.
Las tiendas no registraron mucha actividad comercial a lo largo de la mañana, pero comenzaron a llenarse de clientes al caer la tarde.
A las 20,00 horas, en el estacionamiento del centro comercial Pontevella había aparcados 443 automóviles, una cifra similar a los días laborales. El parking tiene capacidad para 670 vehículos.
En el citado espacio comercial aseguraban que se registró bastante actividad comercial, no tanta como un sábado, pero como cualquier otro día. La afluencia de clientes se incrementó por la tarde. Por la mañana, hubo menos.
Los mismo sucedió en Carrefour, desde donde dejaban claro que la afluencia de público era similar a la de cualquier otro día.
Mientras, en el centro de la ciudad, el comercio también abrió las puertas e, igual que en las grandes áreas, la afluencia de clientes fue mucho mayor por la tarde en todos los locales.
A las 20,00 horas, aún había abiertos puestos de flores en la plaza de Abastos, dada la afluencia de clientes. "Aún estamos vendiendo, hay personas que no pudieron venir hasta ahora y aún estamos trabajando. La jornada fue intensa", explicó Juan Atrio, de la floristería Milagros Albitos.
