La Guardia Civil estableció ayer un amplio dispositivo en Ribadavia para localizar a un hombre, posiblemente extranjero, que realizó compras en los negocios de la villa con billetes de 100 euros falsificados. Uno de los comerciantes se percató del engaño y alertó a los agentes, pero cuando llegaron ya era tarde, el cliente había desaparecido.
La Guardia Civil, con la descripción dada por el afectado, estableció un control de búsqueda por todo el casco urbano, al que se sumó la Policía Local, pero las pesquisas no dieron resultado.
Al mismo tiempo, los agentes alertaron de la situación a los responsables del resto de establecimientos para que estuvieran precavidos. Así, descubrieron que el hombre había comprado en otro negocio, también con otro billete de 100 euros falsificado. La nueva víctima aportó la misma descripción del sospechoso: un hombre moreno con acento inglés o francés.
La alerta se extendió a la población, dada la excelente calidad de los billetes, difícil de detectar a simple vista, sin la máquina lectora. Los agentes continuaban en la noche de ayer con la vigilancia.
Al mismo tiempo, los agentes alertaron de la situación a los responsables del resto de establecimientos para que estuvieran precavidos. Así, descubrieron que el hombre había comprado en otro negocio, también con otro billete de 100 euros falsificado. La nueva víctima aportó la misma descripción del sospechoso: un hombre moreno con acento inglés o francés.
La alerta se extendió a la población, dada la excelente calidad de los billetes, difícil de detectar a simple vista, sin la máquina lectora. Los agentes continuaban en la noche de ayer con la vigilancia.
