La Audiencia será el órgano judicial que decidirá finalmente si el gran incendio forestal del 8 de abril del pasado año que calcinó 430 hectáreas de montes de Bande y Verea fue debido a una imprudencia de las brigadas forestales.
Las dos comunidades de montes personadas en el proceso -Monte Grande II y Vilar-Paredes-, Telefónica y el Tecor de caza de Verea han recurrido la decisión adoptada por la jueza de Bande de archivar el caso. Esta última estima que el escape del fuego se produjo de 'manera completamente accidental por un cambio de dirección o de intensidad el viento', conforme a la tesis de la fiscal de Medio Ambiente.
El fuego, que provocó daños y perjuicios económicos valorados en casi dos millones de euros, según los informes periciales incorporados a las diligencias, se debió, a juicio de las comunidades de montes en mano común afectadas, a una negligencias de los agentes forestales -hablan de imprudencia de carácter grave- cuando procedían a realizar una quema autorizada en montes de Bande (Monte Grande II) con unas condiciones meteorológicas poco aconsejables (hablan de 'fuerte viento'). 'No sólo no suspendieron la quema que realizaban sino que no enfriaron de manera suficiente el terreno ya calcinado y no realizaron control alguno de la zona adyacente en la que se originó el incendio y en cuya dirección soplaba el viento', alega el letrado que representa a la comunidad de montes de Vilar y Paredes.-
Los cazadores de Vera enfatizan 'las irreparables consecuencias de tipo ambiental, social y económicas que ocasionó el fuego' y achacan un 'comportamiento imprudente' al personal de Medio Rural responsable de la quema. 'Non se trata dun cidadán ou agricultor de a pé ao que se lle escapa un lume nunha queima de maleza senón que estamos a falar de persoal altamente cualificado'. Alegan ante la Audienciaque los medios allí presentes eran 'inoperativo e inadecuados' para hacer frente a un imprevisto.
El fuego, que provocó daños y perjuicios económicos valorados en casi dos millones de euros, según los informes periciales incorporados a las diligencias, se debió, a juicio de las comunidades de montes en mano común afectadas, a una negligencias de los agentes forestales -hablan de imprudencia de carácter grave- cuando procedían a realizar una quema autorizada en montes de Bande (Monte Grande II) con unas condiciones meteorológicas poco aconsejables (hablan de 'fuerte viento'). 'No sólo no suspendieron la quema que realizaban sino que no enfriaron de manera suficiente el terreno ya calcinado y no realizaron control alguno de la zona adyacente en la que se originó el incendio y en cuya dirección soplaba el viento', alega el letrado que representa a la comunidad de montes de Vilar y Paredes.-
Los cazadores de Vera enfatizan 'las irreparables consecuencias de tipo ambiental, social y económicas que ocasionó el fuego' y achacan un 'comportamiento imprudente' al personal de Medio Rural responsable de la quema. 'Non se trata dun cidadán ou agricultor de a pé ao que se lle escapa un lume nunha queima de maleza senón que estamos a falar de persoal altamente cualificado'. Alegan ante la Audienciaque los medios allí presentes eran 'inoperativo e inadecuados' para hacer frente a un imprevisto.
