El gobierno municipal de Ourense someterá a aprobación de la Corporación una modificación de créditos para disponer de fondos con los que afrontar la redacción del nuevo Plan de Urbanismo y la cartografía anexa, que valora en dos millones, aunque la Xunta aportará el 50% del primer documento, que habrá que redactar después de que los jueces anulasen el planeamiento del ex alcalde Manuel Cabezas. El acuerdo se adoptará el mes próximo pero el nuevo PXOM aún tardará hasta cinco años en entrar en vigor.
Dos millones de euros. Es la cantidad que, en principio, estima el gobierno municipal de la ciudad para hacer frente a la redacción del nuevo Plan de Urbanismo y la cartografía que le acompañará, después de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia anulase el planeamiento diseñado y aprobado por el ex alcalde Manuel Cabezas, lo que, precisamente, obliga a hora a tamaño desembolso. Lo hará independientemente de que el Supremo admita o no a trámite los recursos de casación presentados contra las citadas resoluciones, seguro, dice la concejala de Urbanismo, de que el Alto Tribunal echará abajo el Plan, ahora o dentro de tres años.
La cantidad mencionada será obtenida de la modificación de créditos que, ha precisado la edil Áurea Soto, el gobierno local someterá a aprobación de la Corporación municipal en el mes de julio, con la salvedad de que el 50% de los fondos destinados al nuevo planeamiento serán sufragados con la Consellería de Política Territorial.
De momento, la Concejalía de Urbanismo aguarda por el pliego de condiciones que encargó a una empresa externa y que regirá el concurso de adjudicación de ese proyecto de planeamiento que, por cierto, será de redacción compleja -habrá que volver a diseñar el desarrollo de la ciudad sólo cinco años después de que un Plan anterior entrase en vigor- y larga, en torno a los cuatro o cinco años, porque será importante que lo que se apruebe tenga total seguridad jurídica, precisa Áurea Soto.
Mientras, Concello y Política Territorial definen las fórmulas urbanísticas a emplear en esta situación de falta de planeamiento (por mucho que el PXOM actual aún esté vigente porque su anulación definitiva puede llegar en menos de un año) para mantener desbloqueadas cuatro actuaciones que Urbanismo considera básicas e imparables: la integración del AVE en la ciudad, el desarrollo de los suelos empresariales anunciados recientemente por el alcalde, la ronda bulevar, que conectará el sur de la ciudad con O Couto y los espacios termales.
Para ello, el departamento de Soto plantea la elaboración de planes sectoriales, que suelen aplicarse cuando hay que desarrollar viviendas protegidas o suelos para diferentes usos; o bien modificaciones puntuales del Plan de Urbanismo de 1986 que, aunque obsoleto, sí ofrece garantías jurídicas. En este caso, explica la edil, se elaborarían planes especiales que se incorporarían después como modificaciones urbanísticas.
Flager vuelve a reunirse con el alcalde
Al Plan de Urbanismo todavía vigente se agarra precisamente la promotora Flager para defender la validez de su proyecto de viviendas, centro comercial -el acuerdo con El Corte Inglés se mantiene- y hotel en la Finca Santamarina. Tras un primer desencuentro con el alcalde y la concejala de Urbanismo, el representante de la empresa en esta negociación, Francisco Castro, precisaba aún ayer que el acuerdo no era imposible aunque se mantiene a la espera de las nuevas peticiones que realice el Concello para evaluarlas. De hecho, Castro y el regidor iban a reunirse el pasado viernes pero el pleno extraordinario lo impidió, por lo que no se descarta que la cita se realice esta misma semana. Castro, que dice desconocer las pretensiones del actual gobierno local y que éste mantiene también en la confidencialidad, recuerda que su proyecto de compensación sólo está pendiente de la aprobación definitiva y que el de urbanización ya está presentado aunque sin tramitar.
La cantidad mencionada será obtenida de la modificación de créditos que, ha precisado la edil Áurea Soto, el gobierno local someterá a aprobación de la Corporación municipal en el mes de julio, con la salvedad de que el 50% de los fondos destinados al nuevo planeamiento serán sufragados con la Consellería de Política Territorial.
De momento, la Concejalía de Urbanismo aguarda por el pliego de condiciones que encargó a una empresa externa y que regirá el concurso de adjudicación de ese proyecto de planeamiento que, por cierto, será de redacción compleja -habrá que volver a diseñar el desarrollo de la ciudad sólo cinco años después de que un Plan anterior entrase en vigor- y larga, en torno a los cuatro o cinco años, porque será importante que lo que se apruebe tenga total seguridad jurídica, precisa Áurea Soto.
Mientras, Concello y Política Territorial definen las fórmulas urbanísticas a emplear en esta situación de falta de planeamiento (por mucho que el PXOM actual aún esté vigente porque su anulación definitiva puede llegar en menos de un año) para mantener desbloqueadas cuatro actuaciones que Urbanismo considera básicas e imparables: la integración del AVE en la ciudad, el desarrollo de los suelos empresariales anunciados recientemente por el alcalde, la ronda bulevar, que conectará el sur de la ciudad con O Couto y los espacios termales.
Para ello, el departamento de Soto plantea la elaboración de planes sectoriales, que suelen aplicarse cuando hay que desarrollar viviendas protegidas o suelos para diferentes usos; o bien modificaciones puntuales del Plan de Urbanismo de 1986 que, aunque obsoleto, sí ofrece garantías jurídicas. En este caso, explica la edil, se elaborarían planes especiales que se incorporarían después como modificaciones urbanísticas.
Flager vuelve a reunirse con el alcalde
Al Plan de Urbanismo todavía vigente se agarra precisamente la promotora Flager para defender la validez de su proyecto de viviendas, centro comercial -el acuerdo con El Corte Inglés se mantiene- y hotel en la Finca Santamarina. Tras un primer desencuentro con el alcalde y la concejala de Urbanismo, el representante de la empresa en esta negociación, Francisco Castro, precisaba aún ayer que el acuerdo no era imposible aunque se mantiene a la espera de las nuevas peticiones que realice el Concello para evaluarlas. De hecho, Castro y el regidor iban a reunirse el pasado viernes pero el pleno extraordinario lo impidió, por lo que no se descarta que la cita se realice esta misma semana. Castro, que dice desconocer las pretensiones del actual gobierno local y que éste mantiene también en la confidencialidad, recuerda que su proyecto de compensación sólo está pendiente de la aprobación definitiva y que el de urbanización ya está presentado aunque sin tramitar.
