El Concello debe medio millón en horas extra a los bomberos

Un camión de los bomberos en el parque de A Chavasqueira.
photo_camera Un camión de los bomberos en el parque de A Chavasqueira.
Los trabajadores del parque computan una media de 400 horas anuales al margen del horario 

Los bomberos de Ourense llevan un año y dos meses realizando cientos de horas extra que aún no se vieron reflejadas en sus salarios, ya que el Concello no las remunera pese a existir dos sentencias que obligan al ente público a pagar. Cada trabajador ejerció una media de 400 horas a mayores de su horario y cada una tiene un coste de 24 euros. Según el sindicato Solidaridad, que ayer por la mañana presentó una queja en el registro de la administración local, estos trabajadores están cada vez más solicitados para eventos o servicios ordinarios. Sus asistencias se hacen efectivas, incurren en un exceso horario y no reciben compensación. 

Por otra parte, fuentes del propio servicio antiincendios, indican que la solicitud continua de refuerzos viene dada por la escasez de personal, que no llega al mínimo para mantener la ciudad segura. Según los parámetros de la Unión Europea y la Dirección General de Protección Civil y Emergencias, debería haber un bombero por cada mil habitantes. En Ourense, son 53, la mitad de los que deberían ser. 

En cuanto a los impagos, según Solidaridad, hay sentencias del Tribunal Supremo del 2020 que obligan a pagar los pluses de festividad y nocturnidad en vacaciones, licencias, permisos o bajas, pero los ingresos llevan desde julio de 2021 sin producirse y desde el verano de 2022 la falta de retribución es reincidente. 

También existe una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) de marzo de este año que da la razón a los bomberos y reconoce el exceso horario.

Actualmente, Ourense es el único parque de bomberos de España que incumple el horario de la Secretaría General del Estado, de un máximo de 1.642 horas anuales.  Solidaridad apunta que desde la última sentencia del TSXG, “los bomberos de Ourense continúan excediéndose en el horario legal, que sumado a los tiempos de descanso no disfrutados, supone que trabajan gratis 650 horas al año, provocando un riesgo de accidente o enfermedad profesional, debido a la fatiga y poniendo en riesgo la salud de los trabajadores y sus víctimas”, señaló el sindicato. 

Medio millón

La hora extra se paga a 24 euros en el parque de bomberos de A Chavasqueira, aunque la cantidad aumenta un 20% si son nocturnas o festivas. Además, si coincide que son en festivo y es de noche, el precio es un 40% superior. La nocturnidad son todas las horas comprendidas entre las 20,00  y las 8,00 horas. Dado que de media los trabajadores realizan 400 horas extra al año, el Concello debe a la gran mayoría de los bomberos unos 10.000 euros. 

En el parque son 53 trabajadores por lo que la deuda municipal ascendería a más de medio millón de euros: se superarían los 530.00 euros para todo el parque.

La escasez de personal, un riesgo para la seguridad de la ciudad

El drama de la falta de personal en el parque de Bomberos  no es nada nuevo. La merma, acentuada en pandemia, se prolonga  a lo largo de los años a la par que la administración local solicita la presencia de bomberos en más servicios. 

Si se tienen en cuenta los parámetros que exige la Unión Europea, la ciudad no está segura. Sería conveniente que hubiese un bombero por cada 1.000 habitantes o, al menos, un mínimo de 71 trabajadores como había en 2008, el último año en que se cumplieron los requisitos de personal.

Actualmente hay 53 personas. Las últimas incorporaciones se produjeron en febrero de este año, cuando doce nuevos trabajadores tomaron posesión. Hasta entonces, la última oferta de empleo público fue en 2010, aunque en 2011 se incorporaron nueve bomberos  a raíz de una oferta del ayuntamiento. Desde entonces, y pese a las caídas anuales de personal, no entraron nuevos  empleados al cuerpo, sino que permanecieron, a su suerte, pendiendo de un hilo. Solo hubo una excepción: en 2019 entró un funcionario del concello desde promoción interna. 

Por otra parte, el parque estuvo casi quince años descabezado, desde 2007 a 2021. Nadie ocupó el puesto de jefe hasta la llegada de José Ramón Sánchez, quien accedió, a través de una comisión de servicio, al puesto en 2021. Permaneció un año pero, desde el 28 de octubre, el concejal de Seguridad Ciudadana, Telmo Ucha, decidió no renovarle porque “tenía encomendados unos cometidos que no se sacaron adelante”.  Antes de su marcha, Sánchez declaró a este periódico que desde que llegó  intentó mejorar muchas cosas “sin colaboración política”. 

Te puede interesar