El Concello requiere a Vicepresidencia para que retire de las calles la cartelería ‘ilegal’

LR-  La publicidad ‘ilegal’ continúa siendo un estigma en las calles de la ciudad. Carteles, papeles y anuncios no autorizados pueblan paredes, farolas y mobiliario público sin que la ordenanza municipal, vigente desde 1997, consiga disuadir a los anunciantes con multas de hasta 6.000 euros. De hecho, muchos de estos anuncios proceden de organismos públicos, como el caso del juego de rol ‘Irmandiños: a revolta’, organizado por Vicepresidencia de la Xunta, a quien desde el Concello se le ha requerido su retirada.
El artículo 4.1 de la ‘Ordenanza municipal reguladora de la publicidad exterior mediante carteles, cartelerías o vallas publicitarias’ estipula que: ‘Prohíbese fixar carteis ou realizar inscripcións directamente sobre edificios, muros, pedestais de esculturas ou outros elementos similares’.

Esta normativa, vigente desde 1997, parece ‘pasar de largo’ en determinadas zonas de la ciudad, sobre todo en céntricas calles como el Paseo, Santo Domingo, Progreso o Curros Enríquez, entre otras muchas. Así, es más habitual encontrar una farola o una pared ‘empapelada’ que otra impoluta.

Un recorrido por el Paseo da de sí para una buena selección de anunciantes que carecen de permiso municipal para ocupar paredes: Expolimia; la segunda edición del juego de rol ‘Irmandiños: a revolta’ (organizado por Vicepresidencia); cursos de fotografía digital e informática patrocinados por la Xunta; la Feira do Doce Amendoado de Allariz, y otros muchos que hace meses que han perdido la vigencia del anuncio.

Interés general

Desde el Concello de Ourense sostienen que sólo se pueden ‘empapelar’ paredes si el interés general del evento lo requiere, previa solicitud de un permiso que tendrá que ser otorgado por una junta de área. De hecho, si la Policía Local detecta anuncios no autorizados, el procedimiento exige dar aviso al anunciante para que los retire. Si lo hace de forma inmediata, se exime de multa. En caso contrario, las sanciones pueden ir hasta los 300 euros (si es falta leve) y hasta los 6.000 euros, si se considera que la infracción es grave.

Un caso reciente detectado por el Concello es el de los carteles que anuncian la segunda edición del juego de rol ‘Irmandiños: a revolta’. Fuentes municipales advierten que ya han notificado a los organizadores (Vicepresidencia de la Xunta, con colaboraciones del Instituto Galego de Artes Escénicas e Musicais, los concellos de Verín y Monterrei y diversas empresas) su inmediata retirada, algo a lo que ya se han comprometido, aseguran las mismas fuentes.

Desde el Concello sostienen que desde la entrada en vigor de la ordenanza, hace ya una década, ‘poco se ha aplicado’, algo en lo que quiere incidir el nuevo grupo de gobierno, con el fin de evitar la mala imagen que provocan los carteles colocados de forma indiscriminada en los espacios públicos.

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