La Audiencia Provincial de Ourense condenó a Bryan Andrés Cano Henao, de 22 años, a tres años de prisión por un delito de tráfico de drogas, además de al pago de una multa de 20.000 euros.
El encausado, que compareció ayer ante el tribunal provincial, reconoció los hechos que le imputaba el Ministerio Público y confesó haber vendido droga a terceras personas.
El acuerdo al que llegaron todas las partes durante el acto de la vista oral, junto con la propia confesión del acusado, hizo que se le impusiesen tres años de cárcel, frente a los cuatro que pedía en un principio el fiscal para él. Una pena con la que el procesado se mostró conforme.
Los hechos que le imputaba el Ministerio Público ocurrieron en la capital ourensana el 25 de junio del 2010. Ese día, sobre las 18.30 horas, varios agentes de la Policía Nacional lo interceptaron en la orilla derecha del río Miño tras comprobar que estaba solo y mostraba una conducta sospechosa.
En un registro que se le practicó, los agentes le incautaron en un bolsillo de su pantalón una bolsa que contenía 79,700 gramos de cocaína. Tras trasladarlo a dependencias judiciales, le hallaron otro paquete con 49,864 gramos de la misma droga.
El acuerdo al que llegaron todas las partes durante el acto de la vista oral, junto con la propia confesión del acusado, hizo que se le impusiesen tres años de cárcel, frente a los cuatro que pedía en un principio el fiscal para él. Una pena con la que el procesado se mostró conforme.
Los hechos que le imputaba el Ministerio Público ocurrieron en la capital ourensana el 25 de junio del 2010. Ese día, sobre las 18.30 horas, varios agentes de la Policía Nacional lo interceptaron en la orilla derecha del río Miño tras comprobar que estaba solo y mostraba una conducta sospechosa.
En un registro que se le practicó, los agentes le incautaron en un bolsillo de su pantalón una bolsa que contenía 79,700 gramos de cocaína. Tras trasladarlo a dependencias judiciales, le hallaron otro paquete con 49,864 gramos de la misma droga.
