El vertido al río Barbaña ocasionó daños por valor, al menos, de 300 mil euros. El presidente de la Confederación, Fernández Liñares, asegura que el Concello de San Cibrao podría ser sancionado con esta cantidad e incluso una mayor.
La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil aún no cerró definitivamente el balance de daños que ocasionó el vertido tóxico registrado el pasado 24 de junio en el río Barbaña, pero los técnicos, tras analizar todos los datos recogidos en las últimas tres semanas, llevan contabilizadas pérdidas por importe de al menos 300 mil euros. Así lo aseguró el presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Fernández Liñares. De momento, sólo son cálculos técnicos, que habrá que precisar con más exactitud en un futuro, dijo el presidente, recordando que para el organismo de cuenca que él dirige la primera responsable del desastre ecológico en el río Barbaña es la depuradora de residuales del Concello de San Cibrao por no recoger el vertido.
Francisco Fernández Liñares declinó concretar el importe de la sanción que tiene previsto imponer al citado concello. Una vez contabilizados los daños aplicaremos la legislación vigente, que contempla sanciones por infracción grave que van desde los 300 mil a los 600 mil euros, apuntó. La alcaldesa de San Cibrao, Elisa Nogueira, tiene previsto recurrir la sanción nada más recibirla porque no hay ninguna depuradora en Galicia capaz recoger ese vertido, replicó.
El vertido causó la muerte de más de 17.000 peces, que tuvieron que ser recogidos en varios días por 20 personas. El organismo de cuenca, además, contabiliza como daños la repoblación de la fauna, prevista para el próximo mes de septiembre; la recogida de agua para analizar, la vigilancia en el río y los trabajos que están programados: eliminación de especies invasoras, destrucción de tres azudes y limpieza de fango para que el cauce se recupere.
Mientras, la Fiscalía continúa investigando para identificar a los autores del vertido, que arrastró grandes cantidades de ácido clorhídrico, amonio y metales pesados. Las pesquisas las está llevando a cabo la Guardia Civil entre las empresas de los polí gonos de San Cibrao, Barreiros y Pereiro. Francisco Fernández Liñares se mostraba ayer esperanzado con el trabajo que están realizando los agentes. Al final sabremos qué empresa fue, porque son pocas las que utilizan ácido clorhídrico, afirmó.
El BNG irá al fiscal por las obras del Sil
El senador del BNG, Xosé Manuel Pérez Bouza, registró ayer un escrito en la Confederación Hidrográfica Miño-Sil solicitando la suspensión cautelar de las obras de construcción de una segunda central hidroeléctrica en el embalse de San Estevo, en el río Sil, a su paso por Nogueira de Ramuín.
El nacionalista exige al organismo de cuenca actuaciones de forma inmediata dado que, de no ser así, amenaza con llevar los trabajos que se están realizando a la Fiscalía por si fueran constitutivos de delito, dice en el escrito.
Pérez Bouza registró el documento pasadas las 11.00 horas en las oficinas que tiene la Confederación en la calle Curros Enríquez. Poco antes convocó a los medios de cuminación en las puertas de las instalaciones, donde aseguró que el pasado 14 de julio se desplazó a San Estevo y comprobé que Iberdrola (promotora de la central) no está respetando el caudal ecológico mínimo entre la presa de San Estevo y el río Cabe. El agua no circula, llegando algún tramo a estar seco, explicó.
Según Xosé Manuel Pérez, la maquinaria pesada está utilizando el propio lecho del río para realizar las obras. Esta situación resulta intolerable para el nacionalista y es por esto que solicita al organismo de cuenca actuaciones, máxime cuando se trata de un río tan importante y emblemático como es el Sil, asegura.
La Confederación Hidrográfica no tiene previsto paralizar temporalmente los trabajos. Así lo aseguró su presidente, Francisco Fernández Liñares. La empresa tiene todos los permisos e informes favorables para ejecutar el proyecto, dijo, añadiendo que los técnicos están realizando un seguimiento continuo en el tramo del río afectado y de momento no registraron ninguna alteración en la flora y la fauna.
Francisco Fernández Liñares declinó concretar el importe de la sanción que tiene previsto imponer al citado concello. Una vez contabilizados los daños aplicaremos la legislación vigente, que contempla sanciones por infracción grave que van desde los 300 mil a los 600 mil euros, apuntó. La alcaldesa de San Cibrao, Elisa Nogueira, tiene previsto recurrir la sanción nada más recibirla porque no hay ninguna depuradora en Galicia capaz recoger ese vertido, replicó.
El vertido causó la muerte de más de 17.000 peces, que tuvieron que ser recogidos en varios días por 20 personas. El organismo de cuenca, además, contabiliza como daños la repoblación de la fauna, prevista para el próximo mes de septiembre; la recogida de agua para analizar, la vigilancia en el río y los trabajos que están programados: eliminación de especies invasoras, destrucción de tres azudes y limpieza de fango para que el cauce se recupere.
Mientras, la Fiscalía continúa investigando para identificar a los autores del vertido, que arrastró grandes cantidades de ácido clorhídrico, amonio y metales pesados. Las pesquisas las está llevando a cabo la Guardia Civil entre las empresas de los polí gonos de San Cibrao, Barreiros y Pereiro. Francisco Fernández Liñares se mostraba ayer esperanzado con el trabajo que están realizando los agentes. Al final sabremos qué empresa fue, porque son pocas las que utilizan ácido clorhídrico, afirmó.
El BNG irá al fiscal por las obras del Sil
El senador del BNG, Xosé Manuel Pérez Bouza, registró ayer un escrito en la Confederación Hidrográfica Miño-Sil solicitando la suspensión cautelar de las obras de construcción de una segunda central hidroeléctrica en el embalse de San Estevo, en el río Sil, a su paso por Nogueira de Ramuín.
El nacionalista exige al organismo de cuenca actuaciones de forma inmediata dado que, de no ser así, amenaza con llevar los trabajos que se están realizando a la Fiscalía por si fueran constitutivos de delito, dice en el escrito.
Pérez Bouza registró el documento pasadas las 11.00 horas en las oficinas que tiene la Confederación en la calle Curros Enríquez. Poco antes convocó a los medios de cuminación en las puertas de las instalaciones, donde aseguró que el pasado 14 de julio se desplazó a San Estevo y comprobé que Iberdrola (promotora de la central) no está respetando el caudal ecológico mínimo entre la presa de San Estevo y el río Cabe. El agua no circula, llegando algún tramo a estar seco, explicó.
Según Xosé Manuel Pérez, la maquinaria pesada está utilizando el propio lecho del río para realizar las obras. Esta situación resulta intolerable para el nacionalista y es por esto que solicita al organismo de cuenca actuaciones, máxime cuando se trata de un río tan importante y emblemático como es el Sil, asegura.
La Confederación Hidrográfica no tiene previsto paralizar temporalmente los trabajos. Así lo aseguró su presidente, Francisco Fernández Liñares. La empresa tiene todos los permisos e informes favorables para ejecutar el proyecto, dijo, añadiendo que los técnicos están realizando un seguimiento continuo en el tramo del río afectado y de momento no registraron ninguna alteración en la flora y la fauna.
