El gobierno municipal y cuatro de los cincos sindicatos de funcionarios con representación en el Concello de Ourense-USO, UGT, Comisiones Obreras y CIG, ya que CSIF votó en contra- cerraron ayer el acuerdo regulador para los más de 900 funcionarios empleados municipales, que estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2013, salvo denuncia de alguna de las partes. Los cambios introducidos en el convenio de los 850 funcionarios y laborales supondrán una reducción de 750.000 euros en los costes laborales de la institución local, según los cálculos realizados tanto por el gobierno como por los sindicatos.
La disminución económica más importante -casi 600.000 euros- se producirá en el capítulo de las ayudas sociales, en las que se establece un baremo en función de las rentas de cada trabajador y se limitan las que reciben los cónyuges, puesto que sólo podrán tener acceso a ellas si tienen unas rentas inferiores al salario mínimo interprofesional. Con todo, aunque con menor cuantía, las subvenciones abarcan prácticamente los mismos conceptos que los recogidos en el actual acuerdo (estudios, guarderías, instalaciones deportivas, odontología y adquisición de gafas y natalidad), si bien se suprimen completamente las de nupcialidad y las que incentivaban la jubilación anticipada.
HORAS EXTRAS
El convenio reduce el máximo de horas extras anuales que puede realizar cada empleado, pasando de 100 a 25 -aunque este año, para mantener la organización de los servicios, el mínimo será de 75-, bajando también su remuneración (de 15 a 12 euros), lo que supondrá un ahorro para el Concello de entre 90.000 y 100.000 euros. Bajan también las productividades un 50%. El Concello gastó el año pasado 87.000 euros en este concepto.
HORAS EXTRAS
El convenio reduce el máximo de horas extras anuales que puede realizar cada empleado, pasando de 100 a 25 -aunque este año, para mantener la organización de los servicios, el mínimo será de 75-, bajando también su remuneración (de 15 a 12 euros), lo que supondrá un ahorro para el Concello de entre 90.000 y 100.000 euros. Bajan también las productividades un 50%. El Concello gastó el año pasado 87.000 euros en este concepto.
