También actuó en Canarias y Madrid, y utilizó "hombres de paja"
La estafa a la Seguridad Social y a la Agencia Tributaria por parte de la banda criminal que desmanteló esta semana el grupo de extranjería de la Policía Nacional se presume millonaria a tenor de la actividad desplegada. No sólo en Ourense, donde operó a través de nueve sociedades "pantalla" -sin actividad empresarial-, sino también en Canarias y Madrid.
La trama se dedicaba, según fuentes policiales, a la "creación y compra de empresas para la emisión de facturas falsas y contratación de personas eludiendo los pagos a la seguridad social y obtención de préstamos bancarios". De esta forma también daban empleo ficticio a inmigrantes que vivían en situación irregular en España, justificando así contratos laborales que les permitirían formalizar legalmente su residencia.
En el marco de la investigación policial se detuvo a cinco personas mientras que uno de los dos supuestos cabecillas aún sigue en paradero desconocido. La policía lo esperaba en Santiago de Compostela el jueves, procedente de un vuelo desde Panamá, pero no hizo acto de presencia.
A los investigados se les imputan delitos de estafa a la Seguridad Social y a la Agencia Tributaria, además de falsedad documental.
La banda, según dice la Policía, utilizaba "hombres de paja" del país vecino para colocarlos al frente de las empresas. Son cuatro portugueses, a los que está intentando localizar las fuerzas de seguridad lusas, que actuaban como administradores únicos de las mercantiles mientras dos de los investigados (E. N. H. y F. C., este último sin detener aún) figuragan como "representantes o apoderados de los portugueses a fin de gestionar las empresas ficticias".
La investigación comenzó en septiembre de 2015 cuando en virtud de una comprobación policial se verificó que no existía la empresa a la cual pertenecía la persona contratada y en la que estaban ciudadanos españoles y portugueses.
