La inestabilidad institucional provocada tras la ruptura del gobierno municipal de Ourense tiene importantes consecuencias en el día a día de la gestión. Uno de los indicadores que sirve para cotejar la salud de una administración es el del período medio de pago a proveedores, la diligencia para saldar las deudas con los proveedores y no someterles a tensiones de tesorería que les puedan provocar problemas.
La crisis generada a raíz de las sospechas sobre las prácticas irregulares del alcalde ourensano, Gonzalo Pérez Jácome, ha situado el plazo medio de pago de facturas del Concello de Ourense por encima de los cuatro meses, tal y como refleja el último informe de la tesorera municipal y del que se dará cuenta al pleno el próximo viernes.
Aunque sí que se van solventando cuestiones como el abono de las ayudas prometidas a los libreros para incentivar la lectura entre los jóvenes, los impagos de facturas siguen siendo una losa para el Concello, con un período medio de pago a proveedores situado en 125,4 días, cifra nunca antes alcanzada. El propio Jácome, cuando estaba en la oposición, veía el incumplimiento de la normativa del Ministerio de Hacienda como "una falta de capacidad de gestión", llegando incluso a solicitar la intervención por parte de Estado y Xunta.
Evolución
El orden del día del pleno ordinario de noviembre recoge, además, del punto en el que se dará cuenta del período medio de pago correspondiente a septiembre, un informe elaborado por la tesorera municipal sobre un error detectado en el cómputo de este indicador entre septiembre de 2019 y julio de 2020 al incluir de forma errónea dos facturas emitidas por Aguas de las Cuencas de España al no estar conformadas.
Pese a esto, que rebaja la magnitud del dato, la funcionaria recuerda que "non afecta ó incumprimento do prazo legal que se ven informando desde entonces", ya qeu la demora media en este período osciló entre los 58 días conseguidos en febrero de este ejercicio y los 124,25 días con los que se cerró el pasado mes de agosto, cuando ya empezaron a surgir las dudas sobre la gestión de Gonzalo Pérez Jácome.
Pagos
Para intentar poner freno a la creciente morosidad del Concello, el gobierno municipal ha preparado un expediente de reconocimiento extrajudicial de créditos por importe superior a los 1,2 millones que tratará de aprobar en el pleno de este viernes.
En la propuesta elaborada por los servicios económicos se engloban facturas correspondientes a los ejercicios 2017, 2018 y 2019 que no pudieron seguir la tramitación ordinaria, destacando importes pendientes de pago a la concesionaria de limpieza, Ecourense, o la antigua prestadora del servicio de ayuda a domicilio, Valoriza. El expediente impulsado por el gobierno cuenta con la fiscalización favorable del interventor municipal, que advierte sin embargo de que la demora en los pagos supondrá que el Concello deba hacer frente a intereses de demora. Asimismo, también se han perdido subvenciones.
La Corporación abordará el reparto de sueldos del PP tras pasar a la oposición
Prácticamente dos meses después de la salida del PP del gobierno municipal, que además de renunciar a las competencias delegadas perdieron también su sueldo asociado a las dedicaciones, el pleno abordará el viernes la nueva propuesta de régimen retributivo de la Corporación, que se adapta a la nueva distribución de fuerzas en el consistorio, dado que hasta que estuvo vigente el bipartito, el PP disfrutaba de dos dedicaciones exclusivas (Jorge Pumar y Ana Morenza) y tres al 75% (Flora Moure, Sonia Ogando y Eugenia Díaz Abella).
Ahora, según recoge la propuesta de Alcaldía –que debe ser aprobada en pleno–, los populares disfrutarán de una dedicación exclusiva y tres al 50%. La primera será para Morenza y las otras tres para Moure, Ogando y Díaz Abella, confirman desde el partido.
Continúa sin cambios el reparto para PSOE (tres dedicaciones exclusivas), Ciudadanos y BNG (ambos con una).
Las retribuciones que perciben los miembros de la Corporación no varían. En el gobierno, Gonzalo Pérez Jácome percibe 69.925,94 euros anuales, Armando Ojea (teniente de alcalde) 59.753,4 euros y Telmo Ucha 49.806,54 euros.
Los concejales de la oposición con dedicación exclusiva tienen un salario de 36.323,84 euros, mientras que la parcial supone 18.161,92 euros. Los ediles sin ninguna dedicación perciben dietas por asistencias a órganos colegiados como plenos y juntas de área.
