Las opiniones del programa Punto Crítico, que ayer emitió Telemiño, referentes al derecho o no derecho que tienen los emigrantes a participar de forma activa en las elecciones españolas estuvieron muy divididas.
Cada uno de los presentes defendió, tanto la postura de la entidad a la que representaban, como la suya particular. De un lado, los afectados o partidarios de que los españoles residentes en el exterior continúen ejerciendo su derecho al voto como habían hecho hasta ahora, tanto en las elecciones municipales como en las generales y las autonómicas. La periodista Sonia Torre señaló la 'gravedad' de la implantación del voto rogado y el sistema de urna, mientras que el emigrante Ramiro Bieito afirmó que nadie tiene 'valor moral para dicirme que eu non podo votar no meu Concello, cando pago tódolos impostos e estou alí censado como residente ausente'. José Antonio Armada habló como alcalde de Bande para trasladar 'o sentir dos veciños', que rechazan esta ley.
Frente a ellos se situaron los detractores del voto. Algunos se mostraron contrarios al voto municipal, mientras que otros, como el representante del BNG, José Francisco Ferreiro, son partidarios de la eliminación completa de este derecho, a pesar de 'facer un recoñecemento ó que fixeron os emigrantes, sobre todo, os da primeira xeración'. Precisamente el que ayer más se cuestionó no fue el voto que puedan emitir éstos, sino sus descendientes. El socialista Eladio Osorio, opinó que 'os netos dos emigrantes non deben votar', porque, en muchos casos, 'non pisaron nunca o Concello'. El otro periodista presente, Anxo Lugilde, radicó el origen de esta ley en el 'medo que teñen PSOE e PP' a los posibles efectos electorales de cara a elecciones futuras.
En esencia, 'fraude' fue una de las palabras más recurridas durante el debate de Punto Crítico y que, por lo ayer expuesto, acompaña al voto emigrante. Todos ellos coincidieron en la posibilidad existente de evitarlo y apuntaron también al fraude en política interior. Sonia Torre afirmó que 'el propio Estado es el primero en cometerlo al no cumplir los plazos' que permitan votar a los emigrantes.
Frente a ellos se situaron los detractores del voto. Algunos se mostraron contrarios al voto municipal, mientras que otros, como el representante del BNG, José Francisco Ferreiro, son partidarios de la eliminación completa de este derecho, a pesar de 'facer un recoñecemento ó que fixeron os emigrantes, sobre todo, os da primeira xeración'. Precisamente el que ayer más se cuestionó no fue el voto que puedan emitir éstos, sino sus descendientes. El socialista Eladio Osorio, opinó que 'os netos dos emigrantes non deben votar', porque, en muchos casos, 'non pisaron nunca o Concello'. El otro periodista presente, Anxo Lugilde, radicó el origen de esta ley en el 'medo que teñen PSOE e PP' a los posibles efectos electorales de cara a elecciones futuras.
En esencia, 'fraude' fue una de las palabras más recurridas durante el debate de Punto Crítico y que, por lo ayer expuesto, acompaña al voto emigrante. Todos ellos coincidieron en la posibilidad existente de evitarlo y apuntaron también al fraude en política interior. Sonia Torre afirmó que 'el propio Estado es el primero en cometerlo al no cumplir los plazos' que permitan votar a los emigrantes.
