Un avance tecnológico sin precedentes. Eso es lo que supone el robot médico Da Vinci, que ya funciona en el Complejo Hospitalario Universitario de Ourense. El CHUO dispone ya de esta avanzada máquina quirúrgica. Con este paso adelante, el sistema sanitario gallego se pone a la altura del resto de España en el campo de la innovación en cirugía mínimamente invasiva.
El robot, que consta de cinco brazos articulados dirigidos en todo momento por el cirujano, implica una nueva forma de intervención quirúrgica, en la que el personal sanitario y el Da Vinci trabajarán codo con codo. El espacio que precisa el Da Vinci es considerable, ya que está formado por una consola (donde trabaja el cirujano con los mandos), el carro del paciente (con camilla, brazos ejecutores y pantalla táctil), y la torre de visión.
La formación
El personal de quirófano (cirujanos, enfermeros, auxiliares y celadores) comenzó hace semanas a formarse para poder utilizarlo. "Todos los que lo vayamos a usar, independientemente de nuestro puesto, necesitamos una formación específica y una acreditación en Estrasburgo para poder utilizarlo", explicaba el urólogo Dionisio López Bellido el pasado mes de mayo, mientras reconocía la alegría de su servicio. "En Urología esta era una demanda histórica, así que estamos muy satisfechos de que por fin se haga realidad", asegura.
Beneficios
La utilización de esta máquina en las intervenciones quirúrgicas no supone solo un cambio en la forma de trabajar de los propios sanitarios, sino también un salto cualitativo en el proceso de recuperación del paciente. El objetivo es convertir todas esas intervenciones en operaciones mínimamente invasivas, por lo que el proceso postoperatorio será más corto (tanto la hospitalización como la recuperación final de los enfermos) y menos doloroso.
