La asociación ecologista Amigos da Terra se sumó ayer a la lista de críticas a la gestión de la Xunta en materia de incendios, en especial en labores de prevención. El presidente del colectivo, Xosé Santos, convocó a los medios en los montes de Os Castros, un entorno boscoso perteneciente a los concellos de Toén, Barbadás, A Merca y Cartelle, donde señaló que el sistema de prevención de incendios en Galicia 'no funciona y seguirá sin funcionar si seguimos en el mismo camino'.
Santos lamentó que la Xunta 'esté jugándoselo todo a la misma carta: la extinción, y no realice labores de prevención en plena campaña de incendios'.
El presidente de Amigos da Terra, acompañado de Ángel Vázquez Dorrío, técnico de medio ambiente de la asociación ecologista, mostró como prueba un cortafuegos situado a escasos metros de la base de helicópteros, donde trabaja una brigada aérea de extinción, completamente lleno de matorrales y pinos jóvenes que el propio Santos estimó de una edad de 'seis años'.
Además, los ecologistas criticaron también el 'giro de 180 grados que ha dado el sistema de extinción de incendios de la Xunta de Galicia, con la transferencia de una buena parte del operativo a los concellos'. 'La formación brilla por su ausencia cuando estamos hablando de un trabajo de alto riesgo, y estas brigadas están trabajando por una media de hasta 500 euros menos si lo comparamos con estos últimos años', explicó Santos.
El presidente de Amigos da Terra insistió también el tema del número de integrantes de las brigadas. 'Las bajas ya no se cubren, y hay días que las brigadas cuentan con una, dos o tres personas solamente cuando tienen que ser de siete, por lo que la Consellería debería dar los datos no del número de brigadas, sino del número de brigadistas que están trabajando', criticó Santos, añadiendo que esta situación 'merma el servicio y la eficacia, y pone en peligro tanto a brigadistas como al conjunto de la ciudadanía'.
El presidente de Amigos da Terra, acompañado de Ángel Vázquez Dorrío, técnico de medio ambiente de la asociación ecologista, mostró como prueba un cortafuegos situado a escasos metros de la base de helicópteros, donde trabaja una brigada aérea de extinción, completamente lleno de matorrales y pinos jóvenes que el propio Santos estimó de una edad de 'seis años'.
Además, los ecologistas criticaron también el 'giro de 180 grados que ha dado el sistema de extinción de incendios de la Xunta de Galicia, con la transferencia de una buena parte del operativo a los concellos'. 'La formación brilla por su ausencia cuando estamos hablando de un trabajo de alto riesgo, y estas brigadas están trabajando por una media de hasta 500 euros menos si lo comparamos con estos últimos años', explicó Santos.
El presidente de Amigos da Terra insistió también el tema del número de integrantes de las brigadas. 'Las bajas ya no se cubren, y hay días que las brigadas cuentan con una, dos o tres personas solamente cuando tienen que ser de siete, por lo que la Consellería debería dar los datos no del número de brigadas, sino del número de brigadistas que están trabajando', criticó Santos, añadiendo que esta situación 'merma el servicio y la eficacia, y pone en peligro tanto a brigadistas como al conjunto de la ciudadanía'.
