La declaración de ruina del veterano café Victoria se suma a la situación por la que ya han pasado inmuebles emblemáticos de la ciudad como el de la Banca Romero, hoy en fase de demolición. El casco histórico de la ciudad es la zona más afectada y, a día de hoy, están pendientes de rehabilitación (previa declaración de ruina) edificios como el viejo colegio María Goretti, el inmueble de la calle Monterrei, que acogerá la sede del Comité Antisida, o la que será la nueva sede de Urbanismo.
La declaración de estado ruinoso del edificio número 3 de la Avenida de Pontevedra y su consecuente desalojo es sólo una más de las que ya existen en otros inmuebles de la ciudad, y que se encuentran pendientes de rehabilitación. Entre ellos, y no muy lejos de la edificación del histórico café Victoria, se halla el inmueble de la Banca Romero, que está siendo derribado en estos momentos y en cuyo lugar se van a construir apartamentos de lujo.
No obstante y pese a las rehabilitaciones que ya se han llevado a cabo, el casco viejo es la zona más afectada de la ciudad por las malas condiciones en las que se encuentran algunos de sus edificios. Así, han sido declarados en ruina y ya se han iniciado los trámites para proceder a su reforma, la vieja sede del colegio María Goretti, en la Praza da Imprenta; el edificio de la calle Monterrei, propiedad de la Diputación y que va a ser destinado a la sede del Comité Antisida, o el inmueble sito en la esquina de García Mosquera con Jerónimo Feijóo, que albergará, probablemente este mismo año, las dependencias municipales de Urbanismo.
Ayudas
Y la calle Hernán Cortés es un fiel reflejo de esta situación, con numerosas edificaciones que han sido vaciadas por dentro y que a día sólo mantienen en pie las fachadas, sujetadas por soportes de hierro.
Para evitar la situación extrema a la que se ha llegado con el edificio de la Avenida de Pontevedra, el Concello dispone de 1,2 millones de la Xunta de Galicia para destinar a ayudas de rehabilitación, tanto de fachadas como de interiores, en inmuebles incluidos en las zonas del PERI de Ourense y de Seixalbo.
No obstante y pese a las rehabilitaciones que ya se han llevado a cabo, el casco viejo es la zona más afectada de la ciudad por las malas condiciones en las que se encuentran algunos de sus edificios. Así, han sido declarados en ruina y ya se han iniciado los trámites para proceder a su reforma, la vieja sede del colegio María Goretti, en la Praza da Imprenta; el edificio de la calle Monterrei, propiedad de la Diputación y que va a ser destinado a la sede del Comité Antisida, o el inmueble sito en la esquina de García Mosquera con Jerónimo Feijóo, que albergará, probablemente este mismo año, las dependencias municipales de Urbanismo.
Ayudas
Y la calle Hernán Cortés es un fiel reflejo de esta situación, con numerosas edificaciones que han sido vaciadas por dentro y que a día sólo mantienen en pie las fachadas, sujetadas por soportes de hierro.
Para evitar la situación extrema a la que se ha llegado con el edificio de la Avenida de Pontevedra, el Concello dispone de 1,2 millones de la Xunta de Galicia para destinar a ayudas de rehabilitación, tanto de fachadas como de interiores, en inmuebles incluidos en las zonas del PERI de Ourense y de Seixalbo.
