La grúa municipal retiró durante el año pasado una media de 22 coches cada día del casco urbano de Ourense por estar mal estacionados. La calles más conflictivas, según la Policía Local, son la Praza de Barreiros y la calle Portalón Casar. Los peores días de la semana son los miércoles, jueves y viernes.
La grúa retiró 8.191 vehículos en el 2007 del casco urbano de la ciudad. La plaza Eduardo Barreiros, en el centro de la ciudad, es donde tuvo más actividad, con 1.040 coches mal estacionados, algo que no halla explicación la Policía Local. Hay conductores que dejan el coche incluso en medio de la calzada y se van, explicó el jefe de la Policía Local, Abelardo Ulla.
Le sigue Portalón Casar y Maestro Vide, también en el centro del casco urbano, con 299 y 259, respectivamente. En Cruceiro Quebrado fueron retirados 232 automóviles y en Ponte Pedriña 203. El resto de viales no llega a los 200. La mayoría de las retiradas son por ocupar vados, zonas de carga y descarga, paso de peatones e invadir la calzada. Los conductores, según los datos que maneja la Policía Local, cuando más mal aparcan son los miércoles, jueves y viernes. Los meses en que la grúa retiró más coches durante el 2007 por estar mal estacionados fueron marzo y octubre, con una media de 700.
La Concejalía de Tráfico prepara una batería de medidas para reducir los estacionamientos irregulares y la siniestralidad en el casco urbano. La Policía Local, según dio a conocer el edil, Fernando Varela, intensificará la vigilancia a partir de esta semana para denunciar a los conductores que estacionan en las paradas de autobuses. Non se pode consentir que os autobuses teñan que recoller viaxeiros no medio da calzada porque a parada está chea de coches, señaló Fernando Varela.
También se vigilarán a los conductores que estacionan en pasos de peatones, doble fila o circulan por paseos peatonales, como viene sucediendo en la calle del Paseo.
La citada concejalía también tiene previsto realizar mejoras en cuatro viales, que ya se convirtieron en puntos negros para el tráfico; las avenidas de Marcelo Macías y Zamora; N-525, entre los puntos kilométricos 236 y 239 y glorieta de Curros Enríquez. La ciudad fue escenario en el 2007 de 1.798 accidentes, 80 más que el anterior, de los que 368 fueron con víctimas, una de ellas mortal. Y de ellos, 234 fueron en los cuatro viales citados. El principal punto negro es la rotonda de Curros Enríquez donde, según la Policía Local, los siniestros ocurren por cambios de carril inesperados de los conductores. Este vial tiene capacidad para 1.850 vehículos en una hora y la intensidad media es de 1.960. En los otros tres viales restantes también hay demasiados vehículos, según la Policía Local. En la N-525, los siniestros, 45 en el 2007, se producen por despistes de los conductores, mientras que en Marcelo Macías ocurren por los adelantamientos indebidos. Las causas más frecuentes de los accidentes de tráfico en la avenida de Zamora son no respetar las señales semafóricas.
Le sigue Portalón Casar y Maestro Vide, también en el centro del casco urbano, con 299 y 259, respectivamente. En Cruceiro Quebrado fueron retirados 232 automóviles y en Ponte Pedriña 203. El resto de viales no llega a los 200. La mayoría de las retiradas son por ocupar vados, zonas de carga y descarga, paso de peatones e invadir la calzada. Los conductores, según los datos que maneja la Policía Local, cuando más mal aparcan son los miércoles, jueves y viernes. Los meses en que la grúa retiró más coches durante el 2007 por estar mal estacionados fueron marzo y octubre, con una media de 700.
La Concejalía de Tráfico prepara una batería de medidas para reducir los estacionamientos irregulares y la siniestralidad en el casco urbano. La Policía Local, según dio a conocer el edil, Fernando Varela, intensificará la vigilancia a partir de esta semana para denunciar a los conductores que estacionan en las paradas de autobuses. Non se pode consentir que os autobuses teñan que recoller viaxeiros no medio da calzada porque a parada está chea de coches, señaló Fernando Varela.
También se vigilarán a los conductores que estacionan en pasos de peatones, doble fila o circulan por paseos peatonales, como viene sucediendo en la calle del Paseo.
La citada concejalía también tiene previsto realizar mejoras en cuatro viales, que ya se convirtieron en puntos negros para el tráfico; las avenidas de Marcelo Macías y Zamora; N-525, entre los puntos kilométricos 236 y 239 y glorieta de Curros Enríquez. La ciudad fue escenario en el 2007 de 1.798 accidentes, 80 más que el anterior, de los que 368 fueron con víctimas, una de ellas mortal. Y de ellos, 234 fueron en los cuatro viales citados. El principal punto negro es la rotonda de Curros Enríquez donde, según la Policía Local, los siniestros ocurren por cambios de carril inesperados de los conductores. Este vial tiene capacidad para 1.850 vehículos en una hora y la intensidad media es de 1.960. En los otros tres viales restantes también hay demasiados vehículos, según la Policía Local. En la N-525, los siniestros, 45 en el 2007, se producen por despistes de los conductores, mientras que en Marcelo Macías ocurren por los adelantamientos indebidos. Las causas más frecuentes de los accidentes de tráfico en la avenida de Zamora son no respetar las señales semafóricas.
