La ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, coincide con el Concello de Ourense en la necesidad de recurrir ante el Tribunal Superior de Xustiza el auto judicial que anula la ubicación, en Reza, de la nueva depuradora financiada por su ministerio.
Después de que el alcalde de Ourense anunciara el pasado viernes la decisión del Concello de recurrir el auto judicial que anula la elección de ubicación de la nueva planta de aguas residuales, la titular de Medio Ambiente, Elena Espinosa, se sumó ayer a la cautela expresada por Francisco Rodríguez y recordó que esta decisión no es firme todavía, después de conocerse hace dos días la resolución de la magistrada del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Ourense.
Nuestra postura es coincidente con el Concello, pues aún es una decisión sobre una futura ubicación, y en segundo lugar porque esta planta es novedosa con el fin de evitar inconvenientes para la ciudadanía como los aspectos de malos olores o de sonido, dijo ayer Espinosa para justificar su apoyo al Concello. Por eso, se mostró partidaria de colaborar con el Ayuntamiento a través de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, al considerar además que el auto judicial supone simplemente un paréntesis en la elaboración del proyecto. Así, recordó que pedirán al Concello la licencia municipal correspondiente y someterse a la declaración de impacto ambiental con el fin de cumplir con la normativa autonómica, municipal y europea.
Elena Espinosa hizo ayer estas declaraciones, en el marco de las Xornadas Municipais de Xardinería de Galicia, que se han desarrollado durante dos días en el Auditorio, con la presencia de más de 300 participantes y de una decena de especialistas. Aquí estuvo acompañada por el alcalde, Francisco Rodríguez; el concejal de Medio Ambiente, Demetrio Espinosa, y el director de las jornadas, Carlos Cárcamo.
Nuestra postura es coincidente con el Concello, pues aún es una decisión sobre una futura ubicación, y en segundo lugar porque esta planta es novedosa con el fin de evitar inconvenientes para la ciudadanía como los aspectos de malos olores o de sonido, dijo ayer Espinosa para justificar su apoyo al Concello. Por eso, se mostró partidaria de colaborar con el Ayuntamiento a través de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, al considerar además que el auto judicial supone simplemente un paréntesis en la elaboración del proyecto. Así, recordó que pedirán al Concello la licencia municipal correspondiente y someterse a la declaración de impacto ambiental con el fin de cumplir con la normativa autonómica, municipal y europea.
Elena Espinosa hizo ayer estas declaraciones, en el marco de las Xornadas Municipais de Xardinería de Galicia, que se han desarrollado durante dos días en el Auditorio, con la presencia de más de 300 participantes y de una decena de especialistas. Aquí estuvo acompañada por el alcalde, Francisco Rodríguez; el concejal de Medio Ambiente, Demetrio Espinosa, y el director de las jornadas, Carlos Cárcamo.
