El conflicto de la basura, que registró ayer su quinta jornada de huelga, vivirá esta mañana un punto de inflexión. Por primera vez desde que se iniciara el paro, representantes de la empresa concesionaria, Ecourense, se reunirán con el comité de empresa en un encuentro fijado desde la Alcaldía para intentar que lleguen a un acuerdo que ponga fin a la huelga.
Sobre la mesa estará la propuesta realizada por el alcalde, Francisco Rodríguez, instando a las partes a que acepten como solución al despido de una trabajadora -desencadenante de la convocatoria de la huelga- la resolución que dicte el Juzgado de lo Social.
A priori, el comité de empresa de Ecourense dice estar dispuesto, 'como sempre, ó diálogo'. Aun así, los representantes de los trabajadores apuntan que 'existen unha serie de imprecisións no seu escrito (la propuesta del alcalde) que veñen a desvirtuar a proposta de mediación', motivo por el que quieren que se clarifiquen los términos de un posible acuerdo para 'evitar lagoas que poidan dar lugar a interpretacións dispares, o que representaría un novo conflicto non desexado'. Las 'imprecisións' de la propuesta del alcalde se refieren al planteamiento municipal de que en caso de que el Juzgado considerara que el despido de la trabajadora era improcedente, 'sería a traballadora a que elixira entre ser readmitida ou indemnizada'. Según el responsable de la CIG (el sindicato mayoritario en el servicio), Etelvino Blanco, la propuesta es imposible materializarla tal y como se presenta porque el Juzgado de lo Social sólo dirimirá si el despido ha sido o no nulo, por lo que en ningún caso entrará a valorar la procedencia o improcedencia del mismo. Y es que, explica, la empresa reconoció esa improcedencia en la carta de despido, motivo por el que le ofrecía una indemnización de 16.616 euros, que la empleada rechazó.
Por su parte, desde Ecourense no se entraba a valorar la propuesta del alcalde -que aun a última hora de ayer sostenía que su propuesta es perfectamente asumible- y únicamente se confirmaba que asistiría a la reunión, convocada para las ocho y media de esta mañana en el Concello. Su intención es 'escuchar a los sindicatos y negociar', dijo el gerente, Juan Pérez.
La reunión centraba ayer las expectativas para intentar alcanzar un acuerdo que ponga fin a una huelga que, un día más, volvió a registrar incidencias. La empresa contabilizaba siete vehículos -entre ellos, un camión de recogida de basura- dañados, tanto por ruedas pinchadas como por la introducción de sal u otra sustancia en el depósito de combustible. Asimismo, desde Ecourense se afirmaba que el piquete informativo había impedido trabajar a alrededor de una veintena de trabajadores que habían acudido hasta la nave de O Pino. La Policía identificó a una persona ajena a la empresa por daños en un vehículo.
A priori, el comité de empresa de Ecourense dice estar dispuesto, 'como sempre, ó diálogo'. Aun así, los representantes de los trabajadores apuntan que 'existen unha serie de imprecisións no seu escrito (la propuesta del alcalde) que veñen a desvirtuar a proposta de mediación', motivo por el que quieren que se clarifiquen los términos de un posible acuerdo para 'evitar lagoas que poidan dar lugar a interpretacións dispares, o que representaría un novo conflicto non desexado'. Las 'imprecisións' de la propuesta del alcalde se refieren al planteamiento municipal de que en caso de que el Juzgado considerara que el despido de la trabajadora era improcedente, 'sería a traballadora a que elixira entre ser readmitida ou indemnizada'. Según el responsable de la CIG (el sindicato mayoritario en el servicio), Etelvino Blanco, la propuesta es imposible materializarla tal y como se presenta porque el Juzgado de lo Social sólo dirimirá si el despido ha sido o no nulo, por lo que en ningún caso entrará a valorar la procedencia o improcedencia del mismo. Y es que, explica, la empresa reconoció esa improcedencia en la carta de despido, motivo por el que le ofrecía una indemnización de 16.616 euros, que la empleada rechazó.
Por su parte, desde Ecourense no se entraba a valorar la propuesta del alcalde -que aun a última hora de ayer sostenía que su propuesta es perfectamente asumible- y únicamente se confirmaba que asistiría a la reunión, convocada para las ocho y media de esta mañana en el Concello. Su intención es 'escuchar a los sindicatos y negociar', dijo el gerente, Juan Pérez.
La reunión centraba ayer las expectativas para intentar alcanzar un acuerdo que ponga fin a una huelga que, un día más, volvió a registrar incidencias. La empresa contabilizaba siete vehículos -entre ellos, un camión de recogida de basura- dañados, tanto por ruedas pinchadas como por la introducción de sal u otra sustancia en el depósito de combustible. Asimismo, desde Ecourense se afirmaba que el piquete informativo había impedido trabajar a alrededor de una veintena de trabajadores que habían acudido hasta la nave de O Pino. La Policía identificó a una persona ajena a la empresa por daños en un vehículo.
