La Organización Colegial de Enfermería de Ourense realizó un acto de homenaje a la excelencia profesional de 28 enfermeros/as que cumplían sus bodas de plata y 15 jubilados entre 2014 y el presente año.
La Organización Colegial de Enfermería de Ourense reconoció ayer la excelencia profesional de 42 profesionales, 28 de los cuales cumplían sus bodas de plata con esta vocación, mientras el resto habían alcanzado la jubilación entre el 2014 y este año.
Abrió el acto el presidente del Consello Galego de Enfermería, Sergio Quintairos, quien destacó que "gracias al esfuerzo de todos los profesionales, la enfermería ha pasado de ser un oficio a ser una profesión". Precisamente este carácter de reconocimiento de la labor que realizan los enfermeros/as fue uno de los detalles destacados por la presidenta de la Organización Colegial, Ascensión Pérez, que aludiendo a los que se han jubilado en estos dos últimos años, recordó que "conocieron tiempos difíciles en los que la profesión de enfermero no existía como tal, sino que era un apéndice de la profesión médica".
Previamente al acto, Ascensión Pérez destacaba la importancia del carácter vocacional de esta profesión, "especialmente en un momento en el que se acumulan los recortes, lo que provoca un cierto desencanto entre los enfermeros por el posible deterioro en la atención a los pacientes".
Tras la inauguración, Margarita González Domínguez, jefa de Sección de Jubilación, y Tania Lamas Pérez, directora provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social–Tesorería General de la Seguridad Social, ofrecieron una conferencia titulada "La pensión de jubilación en la actualidad. Modalidades de acceso", donde explicaron cada una de las modificaciones en la prestación de jubilación contributiva y sus modalidades, así como la posibilidad de acceder a la información de la prestación de jubilación a través de internet, "aspectos que son de especial interés para nuestras colegiadas", señaló Ascensión Pérez.
Mariluz Varela (Celanova): "He visto milagros, gente clínicamente desahuciada y que salía adelante"
Esta celanovense acumula ya 26 años en la profesión, en los que ha recorrido media provincia ("empecé en el 86 en el CHUO y después pasé por los centros de salud de Verín, Laza, Trasmiras o A Gudiña, donde pasé 12 años", explica) antes de recalar en el Hospital de Verín, donde actualmente realiza su labor.
Mari Luz Varela afirma que "yo he visto auténticos milagros, gente que clínicamente no tenían ninguna opción porque tenían un cáncer terminal y que, sin embargo, salieron adelante gracias a la predisposición del propio paciente y el apoyo del entorno familiar y también asistencial". Y es precisamente este último aspecto el que le lleva a afirmar con rotundidad que "soy enfermera vocacional y si tuviera la oportunidad de volver a elegir no dudaría en que sería de nuevo enfermera".
Varela sí reivindica "una mayor especialización dentro de Enfermería" y señala que "eres mucho más independiente y reconocida en atención primaria".
Julia Domínguez (Medeiros, Verín): "Lo más triste que recuerdo fue una niña de cuatro años que perdió la pierna"
Julia Domínguez es natural de Medeiros (Verín) y se jubiló el año pasado, después de dedicar 40 de sus 66 años a la profesión. "Empecé en Santiago, donde estuve dos años en quirófano, después pasé a Ourense dos años y me trasladé a Canarias para volver al poco tiempo a Ourense, al maternoinfantil, donde sigo trabajando", explica Julia Domínguez.
A lo largo de esa dilatada trayectoria como enfermera ha visto de todo, cosas buenas y también malas. "Lo más triste que recuerdo fue una niña de cuatro años que había sufrido un atropello de autobús en Oira y se quedó sin una pierna; amputarle una pierna a un bebé de cuatro años es de lo más desagradable que te puede pasar". Pero también tiene recuerdos agradables, "de niños que salieron adelante de las intervenciones y que luego les veías corriendo por la calle y los padres te recordaban; eso es lo más satisfactorio que uno puede encontrar"
