Una mujer de 89 años falleció ayer viernes de un infarto cerca de las ocho horas de la tarde en la calle Ervedelo de la ciudad. Según fuentes de la Policía Local, la mujer estaría caminando sola cuando se desplomó sobre la acera y comenzó a sufrir el infarto. Los primeros en llegar al lugar fueron los agentes de la Policía Nacional, quienes al no disponer de un desfibrilador, llevaron a cabo maniobras de reanimación RCP y pidieron ayuda al 061. Sin embargo, estos últimos les informaron de que no tenían ninguna ambulancia disponible y que tratarían de enviarle ayuda y asistencia desde el PAC.
Entretanto, aparecieron en el lugar un doctor y dos enfermeras fuera de servicio, que también colaboraron en las maniobras de reanimación. Poco más tarde una patrulla de la Policía Local se ofrecía a entregar un desfibrilador portátil, pero ya era tarde y, pese a las descargas no consiguió salvarse la vida de la mujer.
‘‘Podría haberse salvado"
Fuentes del sindicato de la Policía Nacional indicaron que llevan "mucho tiempo reivindicando que los vehículos policiales vayan provistos de desfibriladores semiautomáticos". Dicen que "si tuviesen un desfibrilador en el momento en el que encontraron a la señora, quizá podría haberse salvado".
Además, piden que la dotación del material vaya acompañada por formación específica que permita a los policías nacionales intervenir en este tipo de situaciones de emergencia. Afirman que su tiempo de llegada es de entre 2 y 3 minutos. A la calle Ervedelo, la ambulancia medicalizada tardó más de media hora en llegar.
