Operación Zamburiña

La fiscal: "Es muy triste que la Zamburiña quede sin castigo"

photo_camera Uno de los cuatro agentes imputados, este jueves durante el juicio (EFE).
El inspector de drogas imputado expresa su rabia: "La acusación y el juez consideraron delito la profesionalidad policial"

El juicio de la Zamburiña  en la Audiencia provincial quedó visto para sentencia, que ya se sabe desde hace días que  será absolutoria para los 13 investigados de formar parte de una trama de drogas, entre otros delitos. La última sesión se desarrolló en un contexto de alto voltaje en el que hubo más de un zasca.

La fiscal Pilar Manso, tal como se preveía y con la vista puesta en el Supremo, hizo valer su escrito de conclusiones provisional y no movió un ápice su petición inicial de condena, que suma un total de 100 años de cárcel, a sabiendas que los imputados, cuatro ellos policías del grupo de drogas de la Comisaría de Ourense en 2015, serán absueltos ante la nulidad de las escuchas decretadas por la Audiencia provincial en el trámite de cuestiones previas.

LAS CIFRAS DE LA OPERACIÓN
13
 Los acusados de la Zamburiña.
Delitos
A los investigados se les acusa, en distintos grado de participación, de tráfico de drogas, revelación de secretos, omisión del deber de perseguir delitos , grupo criminal y tenencia ilícita de armas. 
Droga
5,3 kilos de cocaína, 1,2 de hachís, 1 kilo de heroína, 52 gramos de marihuana y 82 mil euros.

El arranque del juicio evidenció la tensión entre la fiscal, a la que se le denegó todos los medios de prueba propuestos, y la presidenta del tribunal, la magistrada Ana del Carmen Blanco Arce. La primera vertió expresiones como “si no puedo opinar no sé que pinto en esta sala”, cuando se le denegó la lectura de la declaración judicial de los imputados, e incluso, cuando se le dijo que tendría media hora para exponer su informe por las limitaciones del covid, espetó: “Nos lo están poniendo muy difícil; nos podían haber dicho que no compareciésemos”. La ponente la invitó a obviar esos comentarios.

La representante del ministerio público justificó su postura (mantener la acusación pese a que nada se le puso de cara en el plenario): “Es muy triste que conductas como estas no se castiguen, porque se está dejando que entren grandes cantidades de droga en la ciudad de Ourense y es difícil luchar contra ello cuando son policías quienes lo permiten ”. 

Este fue el colofón de su intervención, en la que fue desgranando al detalle el escrito de calificación provisional. En su opinión, el grupo de Estupefacientes que dirigía Antonio R.F. -con Felipe M.A., Mercedes C.G. y José Antonio R.F (este solo está acusado de revelación de secretos)- colaboró y favoreció a dos grupos de traficantes -el liderado por Josefa P.G. "Pucha", en el que estaría Rachid E., María B.G. y Xacobe B.F., y otro integrado por Ramón R.R., su mujer Estrella D.G. y Francisco Javier G.C.- así como con los proveedores de ambos grupos, José V.V., que se disculpó por plantar el juicio tras ser detenido en Vigo por el quebrantamiento de un alejamiento, y Fátima F.G. De esta forma, según la fiscal, "Antonio obtenía crédito personal" para su ascenso en la Policía. Su proceder insistió en dos ocasiones traspasaba "las meras infracciones administrativas que considera la sala".

La fiscal: "La conducta de los policías no son meras infracciones administrativas como dice la sala; favorecían a traficantes"

Todos los letrados de los inculpados pusieron el acento “en el vacío probatorio total” y la ausencia de investigación previa a la intervención telefónica así como en el hecho de que se hayan vulnerado derechos fundamentales de los investigados con un auto “inmotivado” que autorizaba pinchazos y declarado nulo. “Se habla de la moralidad de tener que castigar el hallazgo de un presunto delito pero la moralidad también se despliega si todos nos esforzamos porque las decisiones jurisdiccionales sean adecuadas”, aseguró la letrada Beatriz Seijo, quien representa a  inspector Antonio R.F.

Beatriz Seijo (Antonio R.F.): "La moralidad también se despliega si todos nos esforzamos porque las decisiones jurisdiccionales sean adecuadas”

Este último fue el único que utilizó su derecho a la última palabra para expresar “la rabia” que siente contra la justicia que lo sentó en el banquillo, además de pedir perdón a aquellos compañeros, no acusados, pero a los que se les intervino el teléfono “solo por tener afinidad conmigo y porque yo los inducía a trabajar fines de semana y noches sin compensación económica, pero hubo una fiscal y un juez  que consideraron que ser profesional y dedicado al trabajo era delito”.

La abogada de los policías Felipe y Mercedes, ya jubilados, resumió la Zamburiña con una frase: "Lo  que nace dominado por el vicio, viciado está". Recordó Natalia Cabaleiro que sus clientes "sufrieron un martirio judicial durante cinco años que les arruinó la vida", recordando que ambos agentes eran "apasionados de la defensa de la ley". 

Natalia Cabaleiro: "Mercedes y felipe sufrieron un martiro judical que les arruinó la vida"

Jorge Temes (Josefa P.G.): "Asuntos internos vino a ourense de caza por un anónimo con inquina y odio"

Jorge Temes, el abogado de Josefa P.G., para quien la fiscal interesa 13 años de cárcel, arremetió contra el juez del caso porque "dictó un auto de intervención telefónica inmotivado"; contra la fiscalía, "porque no tuteló los derechos de los investigados" y contra Asuntos Internos. "Vino a Ourense de caza para ver cómo podía perjudicar a Antonio en su proyección profesional", movido por una anónimo cargado de inquina y odio". 

Te puede interesar