La inacción municipal y la estrategia seguida por el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, de culpabilizar a los funcionarios de retrasos en algunos proyectos y de absentismo laboral ha provocado que los representantes de los trabajadores digan basta. La junta de personal advertía ayer a Jácome de que “non leva dous días gobernando”, en relación a su propuesta de establecer un control horario, un sistema que, le recordaron, “os representantes dos traballadores sempre estivemos desexosos de implantar”.
Asimismo, la junta de personal afeó a Jácome que lleva casi dos años “e non foi quen de implantar o tan levado e traído control horario”, insinuando que quizás no le interesa, pues lo usa “para engordar o debate nas súas redes sociais”.
En respuesta a las críticas del alcalde por el retraso al llegar al trabajo de los funcionarios, aseguraron que “hoxe xa pasaron as leiteiras e vostede quedou na cama estarricado. Pedímoslle que mañá se levante máis cedo”.
A estas críticas de la junta de personal, se le une un reto inmediato, ya que mañana Jácome tendrá que reunirse con Comisiones Obreras, que tiene previsto expresarle el “malestar general” de todos los trabajadores y exigirle la paralización “de los ataques continuos”, así como una rectificación pública. Además, exigirán la reactivación de todos los servicios o departamenteos “que se han dejado sin actividad, que se hayan cerrado o que se pretendan privatizar”.
“Nosotros cumplimos"
Desde esta central sindical, tienen clara la respuesta a los ataques de Jácome, que los está culpando de casi todos los males y que se ha hecho estos últimos días un “tour” por televisiones nacionales para criticarlos: “Los funcionarios cumplimos y no somos los responsables de la mala gestión política de nuestro Concello”.
