Los cuadros en posesión de los descendientes del artista serán custodiados en la sede de la entidad cultural, situada en el número 3 de la plaza del Trigo, sumándose a la obra de Buciños

La Fundación Ogando recibe el legado de Prego de Oliver

Justo Carnicero, Juliana Otero, José Otero, Baltar y Manuel Prego. (Foto: JOSÉ PAZ)
Los hijos del artista Manuel Prego de Oliver formalizaron ayer, coincidiendo con el 25 aniversario de la muerte del pintor ourensano, la donación de toda su obra a la Fundación Ogando Vázquez, para que la custodie y la exponga en su sede, situada en el número 3 de la plaza del Trigo. El edificio, con más de 1.500 metros cuadrados, abrirá sus puertas a comienzos del próximo verano, según adelantó el gerente de la fundación, José Otero García. Entre las exposiciones permanentes que albergará la fundación, se encuentra parte de la obra de Manuel Buciños y las dos bibliotecas personales de Ogando Vázquez y Odilo Gómez.
Manuel Prego, uno de los hijos del pintor, expresó su satisfacción por cumplir con su 'obligación moral' de custodiar la obra de su progenitor, 'en un lugar digno donde todo el mundo la pueda contemplar'. El presidente de la Diputación, José Luis Baltar, mostró su deseo de que la firma del acuerdo de cesión suponga una 'resurrección de la obra de Prego de Oliver', para que 'tenga el mismo reconocimiento aquí, que el que tiene fuera'. El patrono de la fundación, Justo Carnicero, se expresó en este mismo sentido e indicó que el objetivo de la entidad es 'recuperar las obras de pintores y escritores uqe permanecían en el olvido'.

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