Un vecino de la calle Santo Domingo de la ciudad movilizó ayer a los bomberos y Policía Local al creer que un edificio, contiguo a su vivienda, estaba ardiendo.
La alarma fue dada pasadas las 12.00 horas y los efectivos de emergencia acudieron de inmediato al lugar, pero pronto comprobaron que el humo que había alarmado al vecino no procedía de un incendio, si no de las máquinas y productos que utilizaba los operarios de una empresa para fumigar el inmueble.