Los incendios forestales dieron ayer un respiro a los efectivos de extinción después de las duras jornada del jueves y viernes. Este último día se registraron una decena de fuegos a lo largo de la provincia. El día anterior, un fuego declarado en Velle inundó de humo la ciudad y su periferia.
Pero, con todo, ayer también hubo incendios. Los operarios tuvieron que emplearse a fondo para sofocar fuegos en A Mezquita, Paderne de Allariz y Boborás. Los tres se declararon prácticamente a la misma hora, entre las cuatro y las cinco de la tarde, en zonas de abundante maleza. El registrado en Boborás comenzó en la margen de una carretera después de producirse un accidente de tráfico.
Medios
Los tres fuegos calcinaron 30 hectáreas de monte raso y arbolado y obligaron a intervenir a tres hidroaviones, dos helicópteros y 13 brigadas, además de cinco coches motobomba. Ninguno de los fuegos puso en peligro a núcleos de población, afirmaron en Medio Rural.
El último en quedar extinguido fue el declarado entre Paderne de Allariz y el parque empresarial de San Cibrao. Los efectivos de extinción abandonaban el lugar sobre las 21.30 horas y, según dio a conocer Medio Rural, a es hora no había ningún incendio más activo en la provincia.
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Los tres fuegos calcinaron 30 hectáreas de monte raso y arbolado y obligaron a intervenir a tres hidroaviones, dos helicópteros y 13 brigadas, además de cinco coches motobomba. Ninguno de los fuegos puso en peligro a núcleos de población, afirmaron en Medio Rural.
El último en quedar extinguido fue el declarado entre Paderne de Allariz y el parque empresarial de San Cibrao. Los efectivos de extinción abandonaban el lugar sobre las 21.30 horas y, según dio a conocer Medio Rural, a es hora no había ningún incendio más activo en la provincia.
