El coordinador provincial del PP, José Manuel Baltar, se presentará a la presidencia del partido en Ourense, según él mismo comunicó ayer en una rueda de prensa, solo y en un céntrico hotel. Sólo retirará sus aspiraciones si el actual presidente, José Luis Baltar, opta a la reelección, algo que aún dependerá de una reunión con Alberto Núñez.
Nunca salió de mi boca lo que voy a decir, dijo José Manuel Baltar a los periodistas presentes en su comparecencia pública, convocada en la misma mañana de ayer, en un céntrico hotel de la ciudad, donde anunciaría que optará a la presidencia del PP de Ourense en el próximo congreso provincial. Comenzaba así una comparecencia en solitario, que no en soledad, y fuera de la sede pues es una decisión personal, por otra parte firme, contundente, inapelable, irrevocable, pensada, razonada y que conviene, dijo.
Sólo contempla un escenario que le impida presentarse, por cuestión de respeto y equipo: que su padre, José Luis Baltar, actual presidente, decida optar a la reelección, lo que dependerá de una reunión con el responsable gallego, Alberto Núñez. Baltar Pumar confirmaría después este pormenor, pero también su deseo de irse, salvo que su marcha vaia supoñer un problema insalvable.
José Manuel Baltar, actual coordinador provincial, ha decidido dar el paso porque, además de llevar 17 años afiliado al PP, ha desempeñado cargos de dirección desde 2000 y hasta forma parte del comité ejecutivo del PPdeG. Por ello, argumenta, su experiencia en gestión política está probada y su apellido debe ser algo circunstancial aunque reconoce que, si no fuese Baltar, no habría tantos comentarios.
Por esa experiencia también, dice, su visión ayudará a conformar la estructura del PP en Ourense, más acorde a las demandas sociales, más grande y con más gente. Asegura disponer de un proyecto atractivo, centrista y galleguista, que se encardinará dentro del PPdeG porque Galicia no puede entenderse sin Ourense; un proyecto centrado, dijo, en tres palabras: Ourense, equipo y personas; después añadiría humildad.
Baltar Blanco entiende que su decisión es un reto, asegura que no revisará el pasado, pide claridad y respeto y saludará positivamente todas las candidaturas que se presenten, las de otras personas que también tengan un proyecto para Ourense, con las que está dispuesto a debatir en la campaña electoral interna que se abra cuando sea convocado el congreso.
El candidato ya pulsó la opinión de juntas locales y alcaldes de la provincia
Baltar Blanco ya recorrió las juntas locales del partido en la provincia para pulsar la opinión de los dirigentes municipales sobre su decisión; y también se entrevistó con los alcaldes, pero dice que sólo verá los apoyos cuando comience el congreso, en el momento de recoger los avales. Eso sí, tanto Baltar Pumar como Núñez Feijóo saben de mi vocación, que no de mi decisión, pero, afirma, ni me empujan ni represento a nadie. El presidente gallego, cuando conoció esa intención, no me hizo una reflexión negativa, ni tampoco su padre, con el que no pretende compararse: Sólo intentaré convencer a los que no me apoyan, en la votación del congreso y también después. Y si hay candidaturas alternativas y no gana, podría pensar en una retirada pero, en todo caso, apoyaría sin reparos el proyecto vencedor aunque no sea el mío.
El voto en el congreso es secreto
José Manuel Baltar, que no precisó la fecha del congreso provincial, precisó que el número de compromisarios a los que pedir los avales aún ha de decidirse, siempre, eso sí, por concellos, en función del número de militantes y resultados electorales. Y el voto en la convención será secreto.
Sólo contempla un escenario que le impida presentarse, por cuestión de respeto y equipo: que su padre, José Luis Baltar, actual presidente, decida optar a la reelección, lo que dependerá de una reunión con el responsable gallego, Alberto Núñez. Baltar Pumar confirmaría después este pormenor, pero también su deseo de irse, salvo que su marcha vaia supoñer un problema insalvable.
José Manuel Baltar, actual coordinador provincial, ha decidido dar el paso porque, además de llevar 17 años afiliado al PP, ha desempeñado cargos de dirección desde 2000 y hasta forma parte del comité ejecutivo del PPdeG. Por ello, argumenta, su experiencia en gestión política está probada y su apellido debe ser algo circunstancial aunque reconoce que, si no fuese Baltar, no habría tantos comentarios.
Por esa experiencia también, dice, su visión ayudará a conformar la estructura del PP en Ourense, más acorde a las demandas sociales, más grande y con más gente. Asegura disponer de un proyecto atractivo, centrista y galleguista, que se encardinará dentro del PPdeG porque Galicia no puede entenderse sin Ourense; un proyecto centrado, dijo, en tres palabras: Ourense, equipo y personas; después añadiría humildad.
Baltar Blanco entiende que su decisión es un reto, asegura que no revisará el pasado, pide claridad y respeto y saludará positivamente todas las candidaturas que se presenten, las de otras personas que también tengan un proyecto para Ourense, con las que está dispuesto a debatir en la campaña electoral interna que se abra cuando sea convocado el congreso.
El candidato ya pulsó la opinión de juntas locales y alcaldes de la provincia
Baltar Blanco ya recorrió las juntas locales del partido en la provincia para pulsar la opinión de los dirigentes municipales sobre su decisión; y también se entrevistó con los alcaldes, pero dice que sólo verá los apoyos cuando comience el congreso, en el momento de recoger los avales. Eso sí, tanto Baltar Pumar como Núñez Feijóo saben de mi vocación, que no de mi decisión, pero, afirma, ni me empujan ni represento a nadie. El presidente gallego, cuando conoció esa intención, no me hizo una reflexión negativa, ni tampoco su padre, con el que no pretende compararse: Sólo intentaré convencer a los que no me apoyan, en la votación del congreso y también después. Y si hay candidaturas alternativas y no gana, podría pensar en una retirada pero, en todo caso, apoyaría sin reparos el proyecto vencedor aunque no sea el mío.
El voto en el congreso es secreto
José Manuel Baltar, que no precisó la fecha del congreso provincial, precisó que el número de compromisarios a los que pedir los avales aún ha de decidirse, siempre, eso sí, por concellos, en función del número de militantes y resultados electorales. Y el voto en la convención será secreto.
