¿Por qué a los jóvenes ourensanos son a los que más les cuesta sacar el carné de conducir? Es una pregunta que revolotea por la cabeza de autoescuelas, jóvenes noveles y autoridades. Nadie conoce la causa exacta, pero lo cierto, aunque pocas veces se ha puesto sobre la mesa, es que desde 2015 Ourense es la provincia de toda la España peninsular en la que más gente suspende el examen práctico. Solo la provincia canaria de Las Palmas le supera.
Hace seis años, el 45,2% de los que se sometía a las pruebas prácticas era declarado apto, frente al 48,8% a nivel nacional, sin embargo una decena de provincias tenía un índice todavía más bajo. El problema empezó en 2015. Algunos, aunque sea sottovoce, lo achacan al "exceso de celo" de los examinadores ourensanos. La Dirección General de Tráfico no cree que sea eso, aunque reconoce que "somos estrictos" a la hora de aplicar la normativa para hacer estas pruebas de circulación, que " se han endurecido con los años".
Caída progresiva
En 2015, el porcentaje de aptos cayó al 37,7%, solo detrás de Las Palmas, convirtiéndose Ourense en la provincia de la España peninsular con el índice más bajo de aprobados. El problema se ha repetido en 2016 (37,7%)2017 (38,9%), 2018 (38%) y 2019 (39%) y este 2020 (41%). Todos esos años se fue repitiendo el patrón de que Las Palmas y después Ourense eran las provincias con menor porcentaje de examinados aptos. A nivel nacional apenas ha variado la proporción de aptos: del 48,8 al 47%.
Las bajas cifras de Ourense contrastan con provincias vecinas como Lugo, que con un 59%, está a la cabeza de España en aprobados. Tan cerca y tan lejos. ¿Por qué se está produciendo este fenómeno?
Hay quejas sobre exámenes "demasiado exigentes" y que se fijan "mucho en los detalles" en comparación con otras provincias, si bien las versiones oficiales, tanto de autoescuelas como autoridades apunta también a una relajación por parte de los jóvenes.
David Llorente, jefe provincial de Tráfico, sostiene que las diferencias son "mínimas" a día de hoy, aunque "sí es verdad que estamos por debajo de la media". Llorente señala que "con los años se ha endurecido la prueba, con 25 minutos reales y al menos aquí se está cumpliendo, lo que lo hace más complicado. Somos estrictos, eso es cierto, pero hacemos lo que tenemos que hacer". Reconoce que puede ser que sea un poco más difícil que otras urbes "porque aquí los puntos de entrada y salida a la ciudad son complicadas" y también recuerda que los puntos de salida de los exámenes "no son siempre los mismos" como sí sucede en otras provincias, y que en ese caso favorece a los candidatos a noveles.
Fernando Varela, de la Asociación Provincial de Autoescuelas, reconoce que "con los años hay mucha prisa de los jóvenes por sacar el carné, además de más desinterés por sacarlo, y eso se nota. La gente no se prepara. Sacarse el carné se ha convertido en un trámite administrativo. Es una formación denostada y muchos hasta vienen obligados y quieren hacer las menos prácticas posibles". Varela cree que este factor influye en la reducción de suspensos, sin dejar de nombrar la rigidez que todo el sector achaca a los examinadores. Es más, señala que "no somos ni peores profesores ni peores alumnos que otros sitios", dejando en el aire las culpabilidades.
La asociación de autoescuelas Formaster destaca no solo las bajas cifras de Ourense, sino que solo el 14,8% aprueba el práctico a la primera, y señala un responsable: "Los alumnos quieren sacarse el carné de conducir lo antes posible y la prisa es una de las peores aliadas".
