La generación de las dos crisis
Reportaje
A 28.000 ourensanos milenials les toca sobrevivir a dos desastres económicos en prácticamente una década. Testimonios de vida de la generación más preparada de la historia, que resiste a la incerteza personal y laboral: "Tocará reciclarse, otra vez"
A la generación milenial le toca sobrevivir a dos crisis económicas en poco más de una década. Hay 28.041 ourensanos entre los 25 y 34 años. Los mayores accedieron al mercado laboral cuando les pilló el desastre de 2008 y la extensa cola del paro. Los más jóvenes se pensaban dos veces qué carrera elegir, primando en muchos casos la perspectiva laboral a los deseos personales. Friegaplatos en Inglaterra está en el currículo de muchos. Vivir para trabajar. A esta generación le ha tocado retrasarlo todo y cuando la recuperación económica asomaba y asentaban su vida, una pandemia les deja de nuevo un futuro incierto.
Jesús Prieto, ourensano de 33 años. "Hice comunicación audiovisual, máster de aptitud pedagógica. Empecé a trabajar como asesor de comunicación y en 2012 me quedé sin trabajo. Mientras me buscaba la vida tuve la suerte de que me llamaran para cubrir una baja y sigo allí. También empecé sociología por la Uned, estoy a un puñado de asignaturas de acabarla. Llevo desde 2009 trabajando excepto ese año. Mientras tanto, sigo con mis proyectos. Libros, que es a lo que me quiero dedicar". Dice que al acabar, en plena crisis del 2008, "tuve la suerte de no sentir temor por el fantasma del paro porque el trabajo llegó muy pronto. Pero cuando acabé la carrera, no tenía ni idea de las posibilidades en el mercado laboral. Nunca me preocupé por lo realmente importante en la vida hasta que la realidad me atropellaba". De pequeño, Prieto se grababa en VHS las piezas del festival de comunicación publicitaria El Sol y las veía una y otra vez. "Básicamente me fijaba más en los anuncios que en los dibujos", dice.
Un giro de los acontecimientos
A Jesús Prieto la realidad le atropelló una de las veces en 2012. "Me quedé sin trabajo y ante las escasas oportunidades que había aquí decidí hacer las maletas". Londres, como tantos. El IGE sitúa el 2010 como año con más emigraciones de ourensanos en las últimas tres décadas: se fueron 3.369. En 2012, 3.369. El dato fue cayendo hasta los 2.962 que hicieron las maletas en 2018.
"En Londres me encontré una situación similar. Oferta de trabajo penosa y ayudas inexistentes. Me planté en la embajada y les propuse la creación de una herramienta que pusiera en contacto demadantes de empleo con las empresas del país. Tuve reuniones con ellos y de repente me volvieron a llamar de España para trabajar. Regresé creyendo que era lo correcto. Se confirmó con el tiempo. A los pocos meses me topé con la noticia de que la embajada había creado una plataforma pionera para buscar trabajo en Reino Unido. Me hicieron la de Marconi con la radio".
La independencia, tarde
Más datos. El 25,88% de ourensanos de 25 a 29 años vivía con sus padres en 2018, pero en 2012 eran más del 30%. El 21,82% de ourensanos de 30 a 34 años tampoco pudo abandonar el nido familiar en 2018, en 2009 eran casi el 24% de esta edad.
El salario medio anual de los ourensanos entre 26 a 35 años es de 13.927 euros, solo 3.000 euros más que al cierre del siglo anterior. La generación más preparada de la historia sobrevive. "Lo de ser mileurista cuando me metí en la carrera era un término que se estaba aprendiendo como ser un superviviente", dice Jacobo García-Manzano.
El odioso concepto
Jacobo García-Manzano, ourensano del 84. Según unos expertos u otros, puede entrar en la generación milenial o no. Es de los que desprecia el concepto, quizás por las connotaciones que ha ido adquiriendo. Generación de sufridores, generación perdida... "Dos crisis, ya te digo. En mi generación la idea de una vida exitosa pasaba por ir a la universidad primero. Los que iban a FP se suponía que eran los malos estudiantes. Te vendían la carrera como que garantizaba el éxito". Él escogió pensando en lo que le gustaba. Pedagogía. "Piensas que en algún momento puedes acabar trabajando de ello. Con el tiempo te das cuenta de que las políticas educativas del Estado español simplemente estaban mal enfocadas, no basándose en las necesidades laborales del país".
Jacobo hizo un máster, ejerció de educador por cuenta propia, "pero nunca llegué a asentarme como tal porque las opciones eran vida académica o opositar. Como muchos de mi generación, hemos tenido que buscarnos la vida como hemos podido. He trabajado desde los 18 años. Pintor, camarero...Lo típico". Acabó emigrando. A Escocia. "Para encontrar un trabajo bien remunerado, no para acabar de lo mío". Trabaja en turismo. "Viajarporescocia.com". La situación está jodida. "El gobierno nos mantiene con el 80% del salario y es posible que se vaya reduciendo. Mucho español ya ha tenido que irse con una mano delante y otra detrás. Mi plan era volver a España en algún momento, pero seguramente tenga que frenarlo. Voy a tener que reciclarme, otra vez".
El “lujo" de ser autónoma
Julia Vázquez, milenial de 28 años. Graduada en Arquitectura. "No te metas que lo vas a pasar mal, plena crisis del ladrillo. Me pregunté si solo iba a ser esa mi opción", dice. Se siente "privilegiada" por el mero hecho de ser autónoma. "Me hice autónoma porque tengo especialidad. Me ha costado años de experiencia. Sin especialización, a día de hoy, es pegarte un tiro en la cabeza. Y formarte es dinero. Mucho. El coronavirus me pilló en los inicios de mi vida como autónoma. Cuando despegaba, me daba a conocer y tenía mi cartera de clientes después de un trimestre... ¡bum!, otra crisis".
“Que los milenials no tengan trabajo, debería preocuparnos a todos"
Alberto Vaquero, profesor de Economía Aplicada en el Campus, dice que los milenials "en su mayor parte con un título universitario, con dominio de varios idiomas y muchos de ellos con un máster, nuevamente están comprobando como sus expectativas económicas se están viendo truncadas por un fenómeno exógeno que no se ha podido predecir. Sus esfuerzos, tanto a nivel personal como económico, no están obteniendo la rentabilidad deseada. Esto provoca un sentimiento de desánimo y desconfianza muy elevado, ya que no tienen claro como van a poder salir de esta nueva crisis. o. Que no tengan el trabajo que se merecen o que no tengan un trabajo debería preocuparnos a todos". El experto en Geografía Humana Carlos Ferrás Sexto borra el discurso negativo.
"Tras la crisis vendrá la recuperación que la historia demuestra que siempre es fuerte y consistente. En la economía española y gallega se producirán cambios a partir de la innovación. Los jóvenes actuales tendrán muchas oportunidades con el gran salto adelante de la digitalización y todas las formas de asistencia online en la educación, gestión, servicios sociales y sanitarios... Será una oportunidad para los jóvenes mejor formados", explica Ferrás Sexto.
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