El Juzgado de Guardia de Ourense decretó el miércoles el ingreso en prisión de un vecino de Prexigueiro (Baños de Molgas), A.L.C., de 34 años, por un delito de amenazas y otro de quebrantamiento de condena, tras amenazar de muerte a un conocido suyo y tras hallarle los agentes un cuchillo de 13 centímetros de longitud.
El arrestado, que cumplía pena en Pereiro por un delito de malos tratos a su mujer, había sido puesto en libertad el pasado martes, siendo detenido ese mismo día y pasando a disposición del juez a lo largo de la jornada siguiente, decretando la autoridad judicial su ingreso en la cárcel a tenor del poco tiempo que tardó en delinquir y en base a los hechos que se le imputaron.
A.L.C. habría amenazado verbalmente de muerte a un conocido de su exmujer tras perseguirlo por un camino, después de que supuestamente este último testificase a favor de la que fuera su pareja en un juicio por violencia de género.
Tras tener conocimiento la Guardia Civil de estos hechos, se personaron en el lugar del incidente, decomisándole, según fuentes de la investigación, el cuchillo al imputado, quien, al parecer, había escondido el arma anteriormente entre unos rastrojos en los alrededores de la casa de su exmujer.
El propio detenido, que ya ingresó en el centro penitenciario de Pereiro, llegaría a manifestar que pretendía con el arma blanca prepararse un bocadillo, así como arreglar un cable. Fue arrestado el martes poco después de las nueve de la noche.
El juez tomó declaración a A.L.C. durante la mañana del miércoles como presunto autor de los dos delitos mencionados, uno por amenazar al conocido de su exmujer y otro por quebrantar un dictamen judicial que le prohibía acercarse a su expareja hasta 2013, dado que fue arrestado en las inmediaciones de la casa de la que fuera su compañera.
A.L.C. habría amenazado verbalmente de muerte a un conocido de su exmujer tras perseguirlo por un camino, después de que supuestamente este último testificase a favor de la que fuera su pareja en un juicio por violencia de género.
Tras tener conocimiento la Guardia Civil de estos hechos, se personaron en el lugar del incidente, decomisándole, según fuentes de la investigación, el cuchillo al imputado, quien, al parecer, había escondido el arma anteriormente entre unos rastrojos en los alrededores de la casa de su exmujer.
El propio detenido, que ya ingresó en el centro penitenciario de Pereiro, llegaría a manifestar que pretendía con el arma blanca prepararse un bocadillo, así como arreglar un cable. Fue arrestado el martes poco después de las nueve de la noche.
El juez tomó declaración a A.L.C. durante la mañana del miércoles como presunto autor de los dos delitos mencionados, uno por amenazar al conocido de su exmujer y otro por quebrantar un dictamen judicial que le prohibía acercarse a su expareja hasta 2013, dado que fue arrestado en las inmediaciones de la casa de la que fuera su compañera.
