El fotógrafo ourensano Manuel Outumuro participó ayer en el Foro La Región con una conferencia en la que habló del cocktail explosivo que implica el binomio fotografía-moda y que centra buena parte de las dos exposiciones que tiene en proyecto. La primera de ellas, Tempo atopado, se inaugura hoy en el Museo Municipal de Ourense. La otra, Looks, abre sus puertas en enero en el Museo de la Indumentaria de Barcelona. Fotógrafo autodidacta, Outumuro asegura que la fotografía es, ante todo, una cuestión de sensibilidad.
De tendencia clásica e inspiración cinematográfica, el prestigioso fotógrafo ourensano Manuel Outumuro se ha convertido en uno de esos exponentes claros y representativos del binomio moda-fotografía. Actores, actrices, cantantes, directores de cine, bailarines... personalidades naciona les e internacionales han sido captados por el objetivo de su cámara en una profesión a la que, como él mismo dice, llegó de forma autodidacta desde el campo del diseño gráfico.
Outumuro está ahora entre dos exposiciones que recogen gran parte de su trayectoria y su quehacer fotográfico. Está, en palabras propias, entre el tiempo y la mirada, en una dualidad que centraba su intervención en el Foro La Región y que él simboliza en varios campos: la dualidad entre Ourense (donde nació y hoy se inaugura su exposición Tempo atopado -Museo Municipal-) y Barcelona (donde está asentado y en enero se exhibe su colección Looks), entre la fotografía y la moda, un matrimonio que se retroalimenta, un cocktail explosivo marcado, dijo, por el poder de la fotografía como medio de comunicación no verbal más importante y apasionante que existe y el poder de la indumentaria.
Recién llegado a la tecnología digital de las cámaras, Manuel Outumuro aseguró ayer seguir siendo un tanto analfabeto de las técnicas fotográficas. Y es que, alega, la fotografía no es tanto una disciplina de conocimientos técnicos, sino de sensibilidad. Clásico, sin dejarse llevar por las tendencias, es fotógrafo con estilo propio, sus trabajos se alejan de la espontaneidad para estudiar la localización, la luz, preparar la foto. Y su sello le ha dado prestigio.
Reflejos de su obra y su inspiración
Sesenta instantáneas componen la exposición que Manuel Outumuro inaugura hoy en el Museo Municipal de Ourense. Tempo atopado, que anticipó ayer en el foro, es, explicó, el resultado de su libro Test, donde recoge las imágenes que utilizó como herramienta para la instantánea final. Por eso, en la muestra además de explicarse en cada foto cuándo y por qué fue hecha también se hace una referencia a la página del libro para ver la imagen que sirvió de base a esa foto.
Su conferencia también sirvió de adelante para conocer la exposición que inaugura en enero en el Museo de la Indumentaria de Barcelona, por iniciativa del Ayuntamiento. Looks es un reflejo de los 20 años de fotografía de moda de Manuel Outumuro. Son 200 obras y un vídeo creado para la ocasión por Isabel Coixet con las secuencias de las películas que inspiraron al fotógrafo en su trabajo y que ayer los asistentes a la charla pudieron ver en primicia.
Outumuro hizo un rápido recorrido por la historia de la moda y explicó como antes de llegar la fotografía a este campo se usaban maniquíes dibujados. Los primeros en ver el potencial de la fotografía en la moda no fueron, dijo, ni los diseñadores ni la industria, sino los editores y periodistas.
Outumuro está ahora entre dos exposiciones que recogen gran parte de su trayectoria y su quehacer fotográfico. Está, en palabras propias, entre el tiempo y la mirada, en una dualidad que centraba su intervención en el Foro La Región y que él simboliza en varios campos: la dualidad entre Ourense (donde nació y hoy se inaugura su exposición Tempo atopado -Museo Municipal-) y Barcelona (donde está asentado y en enero se exhibe su colección Looks), entre la fotografía y la moda, un matrimonio que se retroalimenta, un cocktail explosivo marcado, dijo, por el poder de la fotografía como medio de comunicación no verbal más importante y apasionante que existe y el poder de la indumentaria.
Recién llegado a la tecnología digital de las cámaras, Manuel Outumuro aseguró ayer seguir siendo un tanto analfabeto de las técnicas fotográficas. Y es que, alega, la fotografía no es tanto una disciplina de conocimientos técnicos, sino de sensibilidad. Clásico, sin dejarse llevar por las tendencias, es fotógrafo con estilo propio, sus trabajos se alejan de la espontaneidad para estudiar la localización, la luz, preparar la foto. Y su sello le ha dado prestigio.
Reflejos de su obra y su inspiración
Sesenta instantáneas componen la exposición que Manuel Outumuro inaugura hoy en el Museo Municipal de Ourense. Tempo atopado, que anticipó ayer en el foro, es, explicó, el resultado de su libro Test, donde recoge las imágenes que utilizó como herramienta para la instantánea final. Por eso, en la muestra además de explicarse en cada foto cuándo y por qué fue hecha también se hace una referencia a la página del libro para ver la imagen que sirvió de base a esa foto.
Su conferencia también sirvió de adelante para conocer la exposición que inaugura en enero en el Museo de la Indumentaria de Barcelona, por iniciativa del Ayuntamiento. Looks es un reflejo de los 20 años de fotografía de moda de Manuel Outumuro. Son 200 obras y un vídeo creado para la ocasión por Isabel Coixet con las secuencias de las películas que inspiraron al fotógrafo en su trabajo y que ayer los asistentes a la charla pudieron ver en primicia.
Outumuro hizo un rápido recorrido por la historia de la moda y explicó como antes de llegar la fotografía a este campo se usaban maniquíes dibujados. Los primeros en ver el potencial de la fotografía en la moda no fueron, dijo, ni los diseñadores ni la industria, sino los editores y periodistas.
