La ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, comprometió la llegada del AVE a Galicia en el horizonte de 2012, lo que no gustó al BNG, y sólo reconoció retrasos en la variante de la alta velocidad en la ciudad, que además achacó a la Corporación muni cipal de Ourense. En el Congreso, PP y BNG se unieron para acordar la creación de una subcomisión para evalúe plazos e inste al Gobierno a que cumpla con las fechas comprometidas para la finalización del AVE. EL PSOE se posicionó en contra.
La Corporación municipal de Ourense, que acordó por unanimidad una modificación del trazado para que se aleje de la ciudad aunque mantenga la Estación-Empalme como la central de la alta velocidad, es la responsable del único retraso reconocido por la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, en el cumplimiento de los plazos del AVE a Galicia.
Así lo vino a decir la propia ministra al ser preguntada de nuevo sobre la realidad de las condiciones del tramo de alta velocidad entre Lubián y Ourense y si entrará en funcionamiento en la fecha comprometida, el año 2012, una pregunta que le hizo el senador del BNG, Xosé Manuel Pérez Bouza en el Senado.
Pero la ministra no tuvo un día fácil porque, a la misma hora en que respondía en el Senado, en la Comisión de Fomento del Congreso se aprobaba una proposición no de Ley instando al Gobierno a que cumpla con los plazos comprometidos de finalización del AVE con la Meseta y el Eixo Atlántico y una subcomisión que vele por el impulso y la ejecución de las obras públicas de competencia estatal pendientes de ejecutar en la Comunidad Autónoma y que se articulará en el seno de la actual Comisión Bilateral de Cooperación Administración General del Estado-Xunta de Galicia.
En la Cámara Alta, Magdalena Alvarez se vio sorprendida por la ironía con la que el senador Pérez Bouza le recordaba que no hace mucho afirmó que se le ponían los pelos de punta cada vez que se le preguntaba por los plazos para la llegada del AVE a Galicia, los mismos pelos que, dijo el senador, se le ponen a los gallegos cuando comprueban la negativa de la ministra a comprometer con rotundidad una fecha.
El nacionalista le recordó que la alta velocidad acumula unos retrasos injustificables y que no hay concreción alguna sobre la terminación de las obras del tramo entre Lubián y Ourense. Las razones para el BNG sólo pueden deberse a dos causas: a que el Gobierno está trabajando sin ninguna fecha prevista para terminar las obras o que no quiere revelar la verdadera previsión porque ésta se aleja demasiado de la comprometida en campaña electoral por el presidente Zapatero.
Inmune al desaliento, la titular de Fomento se aferró ayer a una excusa cuando menos novedosa para justificar los retrasos acumulados que no negó en ningún momento, y después de decir que con los datos que obran en la actualidad en el Gobierno la fecha sigue estando en el ho rizonte del año 2012, se apoyó en los nueve kilómetros correspondientes al acceso (la entrada de la alta velocidad en la ciudad) a Ourense y los retrasos que ello supone -la tramitación debe repetirse- para justificar la única demora que reconoció.
Pérez Bouza le recordó que el horizonte es infinito y puso en evidencia que con el ritmo que lleva de ejecución esta importante obra, será materialmente imposible que pueda circular un tren de alta velocidad en Galicia por los menos hasta el año 2015.
Ahora son cinco ó seis años
En la sesión de control al Gobierno en el Senado, Alvarez reafirmó los compromisos adquiridos por el Ejecutivo para la ejecución del tramo de alta velocidad entre Lubián (Zamora) y Ourense y la conexión de la Meseta con Galicia y recordó que el pasado año el Gobierno se comprometió a realizarlo en un horizonte de cinco o seis años. Pérez Bouza advirtió a Magdalena Alvarez de que su respuesta no tranquiliza a los ciudadanos de Ourense. Usted sabe que con el grado de ejecución actual es imposible que la alta velocidad llegue a Galicia antes de 2015, subrayó.
Alvarez ironizó con la respuesta del senador y lamentó que la acuse de falta de concreción cuando ha dado fecha. Dice que hay retrasos injustificados cuando sabe perfectamente que el retraso es totalmente imputable a los ocho años de gobierno del PP. En este sentido, insistió en que todos los tramos de la alta velocidad entre Madrid y Galicia están ya en servicio, en obra o en proyecto y explicó que únicamente hay nueve kilómetros del acceso a Ourense Hay que ser coherentes, cuando se pide que se modifiquen los trazados lo que se está diciendo es que haya retraso porque hay que rehacer toda la tramitación, avisó. El ritmo impreso por el Gobierno avala el cumplimiento de nuestros compromisos, los gallegos pueden estar tranquilos, dijo al senador.
Así lo vino a decir la propia ministra al ser preguntada de nuevo sobre la realidad de las condiciones del tramo de alta velocidad entre Lubián y Ourense y si entrará en funcionamiento en la fecha comprometida, el año 2012, una pregunta que le hizo el senador del BNG, Xosé Manuel Pérez Bouza en el Senado.
Pero la ministra no tuvo un día fácil porque, a la misma hora en que respondía en el Senado, en la Comisión de Fomento del Congreso se aprobaba una proposición no de Ley instando al Gobierno a que cumpla con los plazos comprometidos de finalización del AVE con la Meseta y el Eixo Atlántico y una subcomisión que vele por el impulso y la ejecución de las obras públicas de competencia estatal pendientes de ejecutar en la Comunidad Autónoma y que se articulará en el seno de la actual Comisión Bilateral de Cooperación Administración General del Estado-Xunta de Galicia.
En la Cámara Alta, Magdalena Alvarez se vio sorprendida por la ironía con la que el senador Pérez Bouza le recordaba que no hace mucho afirmó que se le ponían los pelos de punta cada vez que se le preguntaba por los plazos para la llegada del AVE a Galicia, los mismos pelos que, dijo el senador, se le ponen a los gallegos cuando comprueban la negativa de la ministra a comprometer con rotundidad una fecha.
El nacionalista le recordó que la alta velocidad acumula unos retrasos injustificables y que no hay concreción alguna sobre la terminación de las obras del tramo entre Lubián y Ourense. Las razones para el BNG sólo pueden deberse a dos causas: a que el Gobierno está trabajando sin ninguna fecha prevista para terminar las obras o que no quiere revelar la verdadera previsión porque ésta se aleja demasiado de la comprometida en campaña electoral por el presidente Zapatero.
Inmune al desaliento, la titular de Fomento se aferró ayer a una excusa cuando menos novedosa para justificar los retrasos acumulados que no negó en ningún momento, y después de decir que con los datos que obran en la actualidad en el Gobierno la fecha sigue estando en el ho rizonte del año 2012, se apoyó en los nueve kilómetros correspondientes al acceso (la entrada de la alta velocidad en la ciudad) a Ourense y los retrasos que ello supone -la tramitación debe repetirse- para justificar la única demora que reconoció.
Pérez Bouza le recordó que el horizonte es infinito y puso en evidencia que con el ritmo que lleva de ejecución esta importante obra, será materialmente imposible que pueda circular un tren de alta velocidad en Galicia por los menos hasta el año 2015.
Ahora son cinco ó seis años
En la sesión de control al Gobierno en el Senado, Alvarez reafirmó los compromisos adquiridos por el Ejecutivo para la ejecución del tramo de alta velocidad entre Lubián (Zamora) y Ourense y la conexión de la Meseta con Galicia y recordó que el pasado año el Gobierno se comprometió a realizarlo en un horizonte de cinco o seis años. Pérez Bouza advirtió a Magdalena Alvarez de que su respuesta no tranquiliza a los ciudadanos de Ourense. Usted sabe que con el grado de ejecución actual es imposible que la alta velocidad llegue a Galicia antes de 2015, subrayó.
Alvarez ironizó con la respuesta del senador y lamentó que la acuse de falta de concreción cuando ha dado fecha. Dice que hay retrasos injustificados cuando sabe perfectamente que el retraso es totalmente imputable a los ocho años de gobierno del PP. En este sentido, insistió en que todos los tramos de la alta velocidad entre Madrid y Galicia están ya en servicio, en obra o en proyecto y explicó que únicamente hay nueve kilómetros del acceso a Ourense Hay que ser coherentes, cuando se pide que se modifiquen los trazados lo que se está diciendo es que haya retraso porque hay que rehacer toda la tramitación, avisó. El ritmo impreso por el Gobierno avala el cumplimiento de nuestros compromisos, los gallegos pueden estar tranquilos, dijo al senador.
