La noche de Fin de Año se saldó en Galicia con 91 intoxicaciones etílicas, de las que cinco fueron atendidas en el CHOU. Los excesos con el alcohol también tuvo sus consecuencias en la carretera: en la ciudad, un conductor que quintuplicaba la tasa permitida provocó un siniestro. Pero no hubo denuncias por fiestas cotillón.
La Nochevieja es, por tradición, noche de excesos en comidas, bebidas y, posteriormente, en diversión. En la gran mayoría de los casos acaba con un inicio de año marcado por la resaca y el cansancio de muchas horas de fiesta. Pero, en ocasiones, también con consecuencias poco deseables para empezar bien el año nuevo. Según ha podido saber este diario, cinco personas fueron atendidas durante la noche del 31 y madrugada del día 1 en las Urgencias del Complexo Hospitalario de Ourense por intoxicación etílica, dos por diferentes lesiones tras verse implicadas en siniestros viarios y otras ocho a causa de golpes, previsiblemente motivados por peleas con otras personas durante las celebraciones de la Nochevieja.
Asimismo, la Policía Local de Ourense tuvo que intervenir en la madrugada en dos accidentes de tráfico en la ciudad. El primero de ellos, a las 7,15 horas, en la intersección de la calles Concejo y Curros Enríquez, donde un conductor novel que quintuplicaba la tasa de alcohol permitida (0,25 miligramos en aire espirado) hizo una maniobra irregular y colisionó con otro vehículo. El segundo, a las 8.45 horas, fue una salida de vía en la calle Río Arnoia. Un percance similar se registró en la carretera de Lamas (Xinzo), que no dejó heridos.
El exceso de alcohol y la carretera volvieron a estar presentes en la Nochevieja ourensana, pero, los conflictos con las fiestas de cotillón parecen ir desapareciendo y ayer, al cierre de la edición, no se había registrado ninguna denuncia por altercados de este tipo. Tampoco grandes altercados, aunque en Verín hubo personas que decidieron dar la bienvenida a 2008 colocando artefactos explosivos en el interior de contenedores.
Accidentes
Entre las diez de la noche del lunes y las diez de la mañana de ayer, el 061 atendió en Galicia a 96 personas víctimas de intoxicaciones, de las que 91 se debieron a la ingesta abusiva de alcohol y cinco al consumo de drogas. Asimismo, la noche de Fin de Año se saldó con siete accidentes de circulación con heridos (nueve víctimas).
Y el día 1 dejó una imagen muy diferente, con las calles prácticamente desiertas durante buena parte del día.
Asimismo, la Policía Local de Ourense tuvo que intervenir en la madrugada en dos accidentes de tráfico en la ciudad. El primero de ellos, a las 7,15 horas, en la intersección de la calles Concejo y Curros Enríquez, donde un conductor novel que quintuplicaba la tasa de alcohol permitida (0,25 miligramos en aire espirado) hizo una maniobra irregular y colisionó con otro vehículo. El segundo, a las 8.45 horas, fue una salida de vía en la calle Río Arnoia. Un percance similar se registró en la carretera de Lamas (Xinzo), que no dejó heridos.
El exceso de alcohol y la carretera volvieron a estar presentes en la Nochevieja ourensana, pero, los conflictos con las fiestas de cotillón parecen ir desapareciendo y ayer, al cierre de la edición, no se había registrado ninguna denuncia por altercados de este tipo. Tampoco grandes altercados, aunque en Verín hubo personas que decidieron dar la bienvenida a 2008 colocando artefactos explosivos en el interior de contenedores.
Accidentes
Entre las diez de la noche del lunes y las diez de la mañana de ayer, el 061 atendió en Galicia a 96 personas víctimas de intoxicaciones, de las que 91 se debieron a la ingesta abusiva de alcohol y cinco al consumo de drogas. Asimismo, la noche de Fin de Año se saldó con siete accidentes de circulación con heridos (nueve víctimas).
Y el día 1 dejó una imagen muy diferente, con las calles prácticamente desiertas durante buena parte del día.
