Pese a las diez llamadas de teléfono de su letrado, Raúl C.L. plantó su comparecencia ante la Audiencia de Ourense, a las 09,45 horas de ayer, para dar el visto bueno a la conformidad pactada con la fiscalía para evitar un juicio con jurado por allanamiento de morada. El joven inculpado, al que la fiscal está dispuesta a dejar la sentencia reducida al mínimo -seis meses de cárcel-, finalmente dio señales de vida. No acudió a la sala de vistas, según aseguró, porque no le sonó el despertador y se quedó dormido. Ahora, habrá que buscar una nueva fecha para ratificar el acuerdo redactado ya en el que la fiscal reduce a seis meses la pena a cambio de asumir su responsabilidad. En caso contrario, quedaría al arbitrio de un jurado popular.
Raúl C.L. está acusado de entrar a vivir en una casa que no era la suya en octubre de 2021, en la avenida de Portugal de la ciudad, aprovechando que la moradora había sufrido un accidente doméstico -fracturó un pie- y requería cuidados de terceras personas que la obligaron a mudarse de casa.
El “okupa” fue visto por un vecino que se sorprendió cuando preguntó a Raúl que tal se encontraba la dueña de la casa y este le dijo que no la conocía de nada, por lo que optó por llamarla por teléfono para comentarle la “jugada”. Además, según le comentó a la dueña de la casa, el inquilino desconocido había sacado del interior de la vivienda unas bolsas. El denunciado estuvo en esa casa una noche, entre el 16 y 17 de octubre, porque la vecina que entró a dar de comer al perro no halló nada extraño antes de las 18.00 horas de ese primer día. Cuando una amiga entró con la Policía a la casa, descubrió que alguien no muy ordenado había estado allí.
Los pimientos en la sartén y la ropa en el tendal
Cuando entró la Policía a la casa, había una sartén en los fogones, pimientos, ropa colgada en el tendal del baño y un edredón sobre la lavadora, además de una tablet sobre la mesilla de la habitación de la dueña. Esta última hacía una semana que se había ido y sus cosas quedaron ordenadas. En el comedero de la perra, había garbanzos.