Las organizaciones apuestan por un Entroido "de transición" y más diurno

Representantes de Xinzo, Laza, Verín, Viana y Vilariño se reunieron para perfilar unos actos adaptados a la situación sanitaria

La siempre poética rivalidad entre los Entroidos más populares de la provincia de Ourense -Laza, Verín y Xinzo- quedó ayer atrás para primar el bien común y la celebración de unas fiestas seguras para todos los ciudadanos. Representantes políticos y de las comisiones del “Triángulo máxico” , a los que se sumó la organización de Viana do Bolo y Vilariño de Conso, se reunieron en el Salón de Plenos de Xinzo para trazar una línea conjunta en las respectivas programaciones debido a la situación sanitaria actual, las restricciones vigentes y la particularidad de unas fiestas que obedecen a una tradición ancestral y siempre motivada por la espontaneidad de los más “entroideiros”, a los que se les pide “prudencia” a la hora de celebrar el carnaval.

Después de una hora de encuentro y adelantándose a la publicación del protocolo específico del Entroido que se dará a conocer en las próximas horas desde la Xunta -la reunión de Xinzo ya estaba fijada para este martes, antes de saberse cuándo sería publicado dicho documento-, los representantes de las distintas festividades acordaron su hoja de ruta: un Entroido más diurno que nocturno, sin orquestas ni reparto de comida -en Laza es tradicional el reparto de bica- o harina -la comisión no la repartirá en el “Fareleiro” limiano- y sin propiciar, en definitiva, grandes aglomeraciones. “Este vai a ser un Entroido de transición, que non vai a ser prepandémico, pero agardamos que sexa o último en pandemia”, manifestó la regidora limiana, Elvira Lama, al término de la reunión. “Non queremos moitas aglomeracións de xente polo que non haberá orquestas e non haberá actuacións como outros anos. Queremos un Entroido baseado máis no día e menos na noite, sobre todo, para que a xente non se aglomere e non corramos riscos innecesarios. Si haberá charangas, aínda que pararán de tocar antes da media noite”, añadió la alcaldesa. Por otro lado, no habrá desfiles infantiles -ni en Xinzo, ni en Verín-. En lo tocante al Entroido limiano, previsto para el próximo 5 de febrero, tampoco se espera la celebración del “Petardazo”. 

Por su parte, Laza no realizará el famoso reparto de bica y tratará de no propiciar actos masivos, aunque, tal y como precisó el alcalde, José Ramón Barreal, “a idea é que se fagan os actos que a poboación realice ‘de motu propio’. Como organización non se vai a facer ningún acto e temos que ser responsables. A problemática non é o que hai a día de hoxe, o malo é o que pode haber despois do Entroido”. 

En Verín, Diego Lourenzo, también matizó que se acogerán a “un modelo máis de rúa, máis de charanga e menos de orquesta”. En esta línea, Lourenzo anticipó que en el jueves de Comadres no habrá bajada de Don Carnal ni recibimiento a la reina para evitar aglomeraciones. “Sabemos que haberá persoas que saian a cear aos restaurantes coas medidas que haxa na hostalería e charangas ata unha hora prudente”, dijo el teniente de alcalde de Verín. Los Entroidos de Vilariño de Conso y Viana do Bolo se quedarán sin desfile el “Domingo gordo”  y tampoco habrá fiesta gastronómica. 

Los presentes coincidieron en señalar que cada Entroido cuenta con sus particularidades y se prevé que puedan tener lugar actos espontáneos que, en todo caso, no dependerán de cada organización: es el caso del famoso “borralleiro” de Laza, el “Fareleiro” y “Oleiro” limianos o las Comadres de Verín.

Hoy se dará a conocer el protocolo de la Xunta para celebrar la fiesta

Los representantes de los Entroidos ourensanos explicaban tras la reunión que el protocolo publicado por la Xunta no cambiaría, en esencia, las líneas acordadas: “Penso que non. Este Entroido vai a ser diferente e prudente. As nosas son unhas liñas mestras que se acaban de acordar e parecen as máis lóxicas”, puntualizó la alcaldesa limiana, Elvira Lama. 

El comité clínico dio el visto bueno al protocolo del Entroido, que será presentado hoy por el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña. El plan prestará atención a los espacios exteriores de uso público. Evitar aglomeraciones y controlar el correcto uso de las mascarillas son algunas de las claves. El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, apuntó hace unos días que el protocolo será “o menos restrictivo posible entendendo que son unhas festas moi importantes”. Las bases serán “sinxelas”, acordes a las medidas ya conocidas: “Non porá medidas diferentes”, añadió Rueda.

El plan a seguir se aprobará, pero Feijóo no descartó ayer que se vaya ajustando con la evolución epidemiológica. Estará al margen de otras restricciones que estén vigentes, como pueden ser las que se apliquen en hostelería o el ocio nocturno. “Imos intentar que se poidan celebrar, se non é con toda normalidade, que se lle vaia acercando”, señaló Rueda.

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