Después del anuncio de la apertura del paso fronterizo entre el municipio de Calvos de Randín y la localidad lusa de Tourem -la cual se hará efectiva este lunes pero con restricciones horarias- el regidor de Baltar, José Antonio Feijóo, opina que "non hai ningunha razón que non sexa política" para mantener la frontera de Baltar con el país vecino cerrada al tránsito de ciudadanos y vehículos, mientras que Calvos de Randín se abre. Por este motivo, el alcalde popular aseguró que esta misma semana se convocará una sesión plenaria extraordinaria en el municipio con el objetivo de tratar este asunto y remitir a la Subdelegación del Gobierno en Galicia las inquietudes al respecto de esta cuestión. "Pediremos explicacións de por que se abre unha fronteira e a outra non", manifestó el alcalde de Baltar. "Esto xa é unha cuestión de dignidade persoal dos veciños. En orde de importancia, o noso paso ocupa o segundo lugar despois de Feces", añadió el popular, quien pidió a la regidora de Xinzo, Elvira Lama "que saia en defensa da fronteira con Montalegre, xa que esta situación está a ocasionar un prexuizo para Xinzo", dijo.
Primar el interés sanitario
Elvira Lama, regidora de Xinzo -localidad hermanada con Montalegre- aseguró ayer que, tras contactar con la Subdelegación del Gobierno, le informaron que la apertura de Calvos se producirá "dos días a la semana, dos horas" y por un hecho "muy puntual" y relacionado con predios y propiedades de algunas personas. "Es una actuación puntual. Aquí creo que lo que debe primar es la salud pública por encima de cualquier interés económico", dijo la alcaldesa socialista. "Aquí todavía estamos limitando los accesos a ciertos negocios y controlando los aforos en espacios públicos, ¡como para abrir al tránsito las fronteras, ya nos gustaría! Todos estaríamos a favor de abrir fronteras ya, pero a mí me parece, de momento, muy arriesgado pensando que ya hay repuntes tanto en Portugal como en España", añade.
La actividad económica y social que une los municipios fronterizos del sur ourensano y el norte de Portugal es innegable. Una de estas empresas -que recibe cada día a una veintena de trabajadores lusos- es Serra do Larouco en Baltar. Allí, su responsable, Alejandro Cuquejo pidió que se flexibilicen las aperturas fronterizas para que sus trabajadores no tengan que realizar los 110 kilómetros que hacen a diario para poder acceder a su puesto de trabajo. "Teñen que vir todos os días e o rodeo por Feces é importante. Nós convivimos moito cos portugueses", apuntó el responsable de Serra do Larouco.
Alcaldes de Pontevedra y Portugal preparan actos de protesta
Los regidores de los municipios de A Guarda, O Rosal, Tomiño, Salvaterra, As Neves, Arbo, Crecente, Caminha, Cerveira, Valença, Monçao y Melgaço mantendrán una reunión durante la jornada de mañana con el objetivo de consensuar acciones de protesta debido a lo que consideran una "desatención" de sus reivindicaciones sobre la apertura de más pasos fronterizos. Además, la Agrupación europea de cooperación territorial -AECT- Rio Minho colocó ayer varias pancartas en los puentes que comunican España y Portugal por Pontevedra solicitando reapertura de fronteras. Se pretende, según fuentes de la Diputación de Pontevedra, expresar "la indignación" de la ciudadanía de las zonas fronterizas que, en muchos casos, "se ve obligada a dar rodeos de hasta 200 kilómetros" para acudir a sus puestos de trabajo y que ve cómo no tienen clientes en sus negocios.
Por otro lado, desde la AECT Rio Minho se critica que las administraciones competentes "no han movido ficha". Concretamente, Uxío Benítez, asegura que "la gota que ha colmado el vaso" fue el anuncio de la apertura de otros tres pasos a partir del lunes a nivel estatal, uno de ellos entre Tourém y Calvos de Randín (Ourense), donde se podrá circular sin restricciones en determinados días y franjas horarias. "¿Como es posible que se abran pasos en otros lugares y en la franja más activa social y económicamente hablando sigan las limitaciones", dijo.
