Las rebajas pinchan este año en Ourense: “Más turistas y menos gasto”

Los escaparates de Santo Domingo y del Paseo todavía anunciaban ayer con carteles los descuentos del verano: “2ª rebajas” “Rebajas de verano” “Rebajas al 50%”. Algunos los retiran hoy, pero la mayoría esperarán hasta después de la vuelta al cole para despegarlos. Tras consultar con media docena de establecimientos del centro, el balance del verano es en general “flojo”. La subida de precios en los alimentos afecta directamente a los bolsillos ourensanos provocando que, según explica Ángeles Rivero, dependienta de La Granja de Perico, el periodo de rebajas no generase “el bum esperado, como ocurrió el año pasado”.

Beatriz Gómez, presidenta de la Federación de Comercio de Ourense, coincide con ella: “El turismo bajó un poco este verano y eso influye”. En 2022, los extranjeros dieron un empujón al gasto. En la zapatería infantil Mi Gatito Pepo, Susana Castro Diz notó la misma afluencia de gente de fuera en 2023, “sobre todo de mexicanos”; pero dice que en el gasto “fueron más light”. Mientras, Luis Rivera, presidente del Centro Comercial Abierto de Ourense, tilda el verano de “extraño” al “no cumplirse las expectativas depositadas en el turismo”.

Lo mismo ocurre en el clásico comercio Carvajal de la Rúa das Tendas: “El extranjero viene y picotea, se lleva alguna cosa que vea a buen precio y merezca la pena, por 30-50 euros”, explica su dependienta, Doresmar González.

En la contraparte, Ilda Álvarez, propietaria de DamaJuana en las galerías Sol desde 2006, ve que “los turistas se dirigen a otros sectores, como la hostelería o el termalismo”, en lugar del textil. También nota que el gasto disminuyó “entre un 20-25%”, con respecto al año pasado. Extenderá las rebajas hasta mediados de septiembre “para intentar eliminar todo el stock posible, que supone un gasto inasumible”.

Cambio en el consumo

Ilda, además, pide “más apoyo por parte de la administración” en “promoción y márquetin” de los productos del comercio local en la ciudad. “No contamos con el mismo músculo económico de las grandes marcas y necesitamos competir contra ellas”. Espera que durante este año “sepan poner solución al problema” y anima a la administración: “En una ciudad pequeña como Ourense, los efectos de las propuestas se notan enseguida”. Por su parte, Beatriz Gómez asegura que, cada vez, “se diluye más la esencia de las rebajas” porque “las grandes marcas ofrecen descuentos durante todo el año”. Así, “arrastran al pequeño comercio a sus dinámicas, contra las que es difícil competir”.

Por este motivo, en Íntimo Varela deciden no hacer rebajas. “Creemos que desvirtúan el espíritu del pequeño comercio, que no se lo puede permitir y se ve obligado a seguir a los grandes”, afirma Jose Ramón García, el dependiente.