El impacto de la soledad no deseada entre los más mayores supone un importante reto en la provincia. Casi 20.000 ourensanos de más de 65 años viven solos actualmente, según los datos recogidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que supone ya un 15% del total de hogares de la provincia. En este contexto, las administraciones -autonómica, provincial y municipal- buscan fórmulas para combatir la soledad y evitar así las duras consecuencias para la salud física y mental de los mayores.
La Diputación anunciaba ya en el debate sobre el estado de la provincia de noviembre un proyecto de termalismo social específico para este colectivo, que ultima estos días. “Trátase dunha iniciativa que se apoia en eixos deste goberno, como son o termalismo, as políticas sociais e a cooperación”, señala Manuel Baltar, presidente provincial. El proyecto se incluye dentro del programa de Termalismo Social de 2023, y se podrá acceder a él a través de los servicios sociales de los concellos, así como del servicio provincial de teleasistencia.
Mientras se ultiman las bases reguladoras del programa, la Diputación ya ha dado a conocer sus principales características. Los participantes podrán visitar todas las semanas un balneario, donde recibirán terapias termales en grupos de hasta 20 personas. De esta forma, no se tratará de un acceso puntual a un espacio termal -como la modalidad de estancias o de tratamientos-, sino que los beneficiarios podrán acudir de forma semanal durante un total de nueve meses.
Las terapias incluirán el acceso a los servicios termales, así como a actividades grupales de diversa naturaleza, donde se aúnen experiencia social y beneficios del agua micromedicinal. Baltar destaca la importancia de la alianza público-privada y la colaboración con los concellos. “Este programa da boa conta da capacidade e axilidade para deseñar un proxecto deste tipo e poñelo en marcha en tan pouco tempo”, destaca.
El primer espacio termal confirmado es el Balneario de Cortegada, que ofertará esta modalidad por un precio de en torno a 270 euros. Sobre esta cantidad, la Diputación aplicará una subvención de 75 euros, lo que implica un precio final de 195 euros. Los participantes podrán pagar íntegro el montante en el momento de solicitar la plaza, o realizar un pago previo de 60 euros y posteriores entregas de 15 euros.
No obstante, cuando las bases reguladoras estén finalizadas, se conocerá el programa íntegro, con los diversos balnearios y precios correspondientes.
Baltar: “É preciso destacar o excelente traballo da Área de Benestar”
Para acceder al programa de termalismo contra la soledad no deseada, los mayores podrán acudir a los servicios sociales de los municipios, así como ponerse en contacto con el servicio provincial de teleasistencia. La Diputación firmará convenios con las administraciones locales, para que los concellos puedan ofertar entre sus vecinos el programa termal. El presidente provincial, Manuel Baltar, destaca los beneficios del proyecto para la salud física y mental de los mayores, y destaca el trabajo realizado desde la Diputación para poner en marcha la iniciativa: “É preciso destacar o excelente traballo da Área de Benestar”.
Las bases reguladoras del programa contemplan la posibilidad de crear turnos para un determinado municipio, grupos de municipios o mancomunidades, para que todas las plazas sean gestionadas desde los servicios sociales de un mismo concello. Serán, por tanto, los trabajadores de este servicio los que valoren la situación de soledad no deseada de la persona que desee acceder a la oferta termal, y serán también los que reciban a todos los vecinos interesados en participar.
Por otra parte, aquellas personas ya beneficiarias del programa de teleasistencia impulsado por la Diputación serán informadas del nuevo programa termal vía telefónica -una vez se presente-, y tendrán a su disposición un asistente a través del cual gestionar su plaza en el proyecto.
