La altas temperaturas irradian la provincia y los termómetros alcanzan valores aparentemente veraniegos. Hoy martes las máximas llegarán a los 23 grados y las mínimas se sitúan sobre los 5. Sin embargo, pese a la racha anticiclónica, los meteorólogos prevén cambios para el fin de semana. A partir del viernes, vuelve el invierno.
"Hasta el jueves se va a mantener la configuración de estos días, pero a partir de entonces el anticiclón se irá desplazando hasta el norte de las islas británicas y, junto a las bajas presiones mediterráneas, se formará un corredor de aires del nordeste", explica Carlos Otero de MeteoGalicia. El resultado de este cambio progresivo será la presencia de un aire "muy frío", que provocará que las máximas de 20 grados pasen a ser de 12, "unas temperaturas más invernales que primaverales", señala Otero.
La temperaturas bajarán más hacia la noche, cuando la sensación térmica será especialmente gélida, sin embargo, no se esperan precipitaciones en toda la provincia, por lo que se descarta la presencia de nieve en las montañas ourensanas.
Aunque la alta montaña no se teñirá de blanco, sí que podría nevar en la costa en cotas atípicamente bajas. "Aunque en Galicia afectará al norte de Lugo y a la provincia de A Coruña y no a Ourense", explica Carlos Otero.
Sin embargo, afirma que "no podemos predecir con exactitud lo que pasará, la previsión podría empeorar de cara al viernes. Pero por el momento en Galicia, la cota se situará en los 1.000 metros", explicó el meteorólogo.
Además, si se cumplen tres factores podría producirse la inversión térmica que alargaría el tiempo de frío: "Poco viento, estabilidad y cielos despejados", cita Otero. Eso provocaría que en horario nocturno la superficie, el terreno, se enfríe muy rápidamente y quede estancado en las zonas de valle, como es el caso de la ciudad de Ourense.
