¡Cuidado con el calamar!

<p> Fotograma de una escena de la serie “El juego del calamar”. </p>
photo_camera Fotograma de una escena de la serie “El juego del calamar”.

A raíz del éxito mundial en torno a la serie “El juego del calamar”, muchos colegios y asociaciones de padres y madres debaten sobre el impacto nocivo que pueden llegar a producir este tipo de contenidos audiovisuales en los más pequeños 

El juego del calamar, la serie más vista en la historia de Netflix, hizo saltar las alarmas en algunos colegios por fenómenos de imitación entre los menores. Abrió el debate sobre el impacto de la violencia de los medios audiovisuales en los niños y sobre la utilidad de sistemas de calificación por edades o controles parentales. Las asociaciones de padres y madres admiten que por el momento no llegó ninguna denuncia concreta sobre la serie, pero algunos colegios decidieron tomar cartas en el asunto con circulares en las que advierten a las familias sobre los peligros de repetir los comportamientos de la serie, mientras otros optaron por prohibir los disfraces basados en el éxito de Netflix en las celebraciones de Halloween.

“Hasta ahora nadie nos ha trasladado su preocupación”, explica Leticia Cardenal, presidenta de Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (CEAPA), que reconoce que desconocía de la existencia de la serie hasta que vio “el revuelo que se ha montado en los medios” y le preguntó a su hijo de 13 años, que sí escuchó hablar de ella en el colegio.

Por su parte, Pedro Caballero, presidente de la Confederación Nacional Católica de Padres de Familia y Padres de Alumnos (CONCAPA), pide a los padres que expliquen a sus hijos que “tanta violencia no es buena” y hace hincapié en la situación en la que los más pequeños quedaron después de la pandemia de la covid-19, en la que “cualquier sensibilidad está a flor de piel”.

Ambas asociaciones demandan a los padres que tengan en cuenta la clasificación por edades de las series y películas, aunque consideran que este sistema ya no es del todo útil, y que utilicen los controles parentales que tienen a su disposición desde de las distintas plataformas, pese a que consideran que “son muy fáciles de quitar”.

“El juego del calamar” está calificada como apta para mayores de 16 años, sin embargo son muchos los niños de edades inferiores que vieron la serie, “incluso acompañados por sus padres”, se queja la portavoz de la madrileña Federación Regional de Asociaciones Franciso Giner de los Ríos, Carmen Morillas.

Desde el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), que se encarga de calificar las películas que llegan a los cines, recuerdan que “las series o largometrajes cuyo primer destino es una televisión o plataforma se califican por autorregulación”, lo que quiere decir que son las propias plataformas que las emiten las que han de considerar para qué edades son válidas.

Netflix subraya que antes de la reproducción de cada episodio de una serie, la plataforma advierte de la clasificación por edades y de los elementos “no aptos para ciertas edades” que puedan aparecer en ellos, como escenas de sexo o malsonantes y episodios de violencia. La compañía asegura máximas garantías de seguridad.

Te puede interesar