La piratería de música, vídeo-juegos, películas y libros a través de internet costó a la industria cultural española unos 11.000 millones de euros en 2010, según las cifras del Observatorio de Piratería que publica semestralmente la Coalición de Creadores e Industrias de Contenidos.
El informe, presentado ayer por el presidente de la Coalición, Aldo Ocese, recoge un aumento de las descargas ilegales del 3,4 por ciento en un año, con un 'galopante' aumento de la piratería en el sector editorial, donde la subida interanual fue del 120% debido a la popularización de los libros electrónicos. Olcese considera que estos datos deben ser el punto de partida a la hora de medir la eficacia de las medidas legales aprobadas por el Gobierno para hacer frente a esta situación, unas actuaciones con las que los responsables de la Coalición están, dijo, 'razonablemente satisfechos, pero no del todo'.
Durante el segundo semestre del 2010, periodo al que pertenece el informe, el valor de lo pirateado fue de 5.562,1 millones de euros, casi cuatro veces por encima del consumo legal, y la tasa de piratería fue del 78,6 %, 3,4 puntos por encima de la que se registraba en el mismo periodo del 2009. Por sectores, la piratería de música alcanzó en dicho semestre el 97,9 % (3.051 millones de euros) y las películas, el 75,8 % (1.546,3 millones), seguidos por los vídeo-juegos, con un 66,2 % (383,7 millones) y los libros, que registraron una tasa del 43,5 % (581,1 millones). En el único sector en el que aumentó la tasa de negocio legal fue en el de las películas, debido a que en el periodo analizado se estrenaron numerosas películas en 3D que 'no se pueden piratear'.
'NI EDAD NI SEXO'
Olcese señaló que las cifras 'desgraciadamente hablan por sí solas', por lo que los creadores sufren una 'creciente preocupación' por el impacto de estas cifras 'en un sector tan importante y que supone el 5 % del PIB'. Frente a la piratería, resaltó, existe una creciente oferta legal que ya es 'una realidad', con 600 páginas de contenidos legales en todos los productos culturales: 'El que no los encuentra es porque no quiere', espetó Olcese.
También aseguró que si hace tres años existía un perfil de las personas que descargaban contenidos de la red ilegalmente, ahora la práctica está tan extendida que no es posible trazar uno, si bien las tasas son mayores en menores y en jóvenes de 18 a 32 años. 'Esto es una lacra que no tiene edad, ni sexo ni nacionalidad', lamentó el presidente de la Coalición. Añadió que internet es 'la auténtica revolución positiva de nuestro siglo, pero ninguna revolución fue posible sin seguridad jurídica y un modelo de negocio rentable'.
Durante el segundo semestre del 2010, periodo al que pertenece el informe, el valor de lo pirateado fue de 5.562,1 millones de euros, casi cuatro veces por encima del consumo legal, y la tasa de piratería fue del 78,6 %, 3,4 puntos por encima de la que se registraba en el mismo periodo del 2009. Por sectores, la piratería de música alcanzó en dicho semestre el 97,9 % (3.051 millones de euros) y las películas, el 75,8 % (1.546,3 millones), seguidos por los vídeo-juegos, con un 66,2 % (383,7 millones) y los libros, que registraron una tasa del 43,5 % (581,1 millones). En el único sector en el que aumentó la tasa de negocio legal fue en el de las películas, debido a que en el periodo analizado se estrenaron numerosas películas en 3D que 'no se pueden piratear'.
'NI EDAD NI SEXO'
Olcese señaló que las cifras 'desgraciadamente hablan por sí solas', por lo que los creadores sufren una 'creciente preocupación' por el impacto de estas cifras 'en un sector tan importante y que supone el 5 % del PIB'. Frente a la piratería, resaltó, existe una creciente oferta legal que ya es 'una realidad', con 600 páginas de contenidos legales en todos los productos culturales: 'El que no los encuentra es porque no quiere', espetó Olcese.
También aseguró que si hace tres años existía un perfil de las personas que descargaban contenidos de la red ilegalmente, ahora la práctica está tan extendida que no es posible trazar uno, si bien las tasas son mayores en menores y en jóvenes de 18 a 32 años. 'Esto es una lacra que no tiene edad, ni sexo ni nacionalidad', lamentó el presidente de la Coalición. Añadió que internet es 'la auténtica revolución positiva de nuestro siglo, pero ninguna revolución fue posible sin seguridad jurídica y un modelo de negocio rentable'.
